Edición n° 2941 . 10/12/2024

Xi pide construir un sistema de gobernanza global justo y razonable en cumbre del G20

RÍO DE JANEIRO, (Xinhua) — El presidente chino, Xi Jinping, abogó el lunes por un sistema de gobernanza global justo y razonable al intervenir en la II Sesión de la 19ª Cumbre del G20 sobre la Reforma de las Instituciones de la Gobernanza Global.

Tras recordar que la Cumbre del G20 ha recorrido una trayectoria de 16 años, Xi afirmó que, desde un nuevo punto de partida, el G20 debe abrir nuevos horizontes a base de los logros ya conquistados, y seguir sirviendo como una fuerza por una mejor gobernanza global y un mayor progreso de la historia.

Es importante tener bien presente que la humanidad vive en una comunidad de futuro compartido, dijo Xi, y añadió que los miembros del G20 deben tomar el desarrollo de otros como oportunidades en lugar de desafíos, y tratar a otros como socios en vez de rivales.

También es menester acatar las normas básicas de las relaciones internacionales basadas en los propósitos y principios de la Carta de la ONU y defender el orden internacional basado en el derecho internacional, afirmó.

Deben aglutinar aún más los consensos internacionales para promover un mundo multipolar igualitario y ordenado y una globalización económica universalmente beneficiosa e inclusiva, añadió.

El presidente chino hizo una propuesta de cinco puntos para mejorar la gobernanza global.

Primero, es necesario que el G20 mejore la gobernanza económica global y construya una economía mundial caracterizada por la cooperación. El G20 debe comprometerse a fortalecer las asociaciones económicas globales y la coordinación de las macropolíticas, cultivar nuevas fuerzas productivas de calidad, forjar el estabilizador de la coordinación de las macropolíticas y crear un ambiente de cooperación económica internacional que sea abierto, inclusivo y no discriminatorio.

También es importante crear un entorno de negocios limpio, persistiendo en la tolerancia cero contra la corrupción e intensificando la cooperación internacional en la repatriación de fugitivos y la recuperación de fondos robados.

Segundo, el G20 necesita mejorar la gobernanza financiera global y construir una economía mundial caracterizada por la estabilidad.

Es imperativo aumentar el derecho a voz y la representatividad de los países en desarrollo, defender juntos la estabilidad del mercado financiero internacional, y prevenir los efectos negativos de desbordamiento derivados del reajuste de las políticas monetarias domésticas. Los países desarrollados deben asumir sus responsabilidades al respecto.

Es indispensable optimizar los sistemas de monitoreo, alerta temprana y tratamiento de los riesgos financieros, y fortalecer la red global de seguridad financiera, con vistas a satisfacer mejor las demandas de finanzas verdes de los países en desarrollo.

Tercero, es menester que el G20 mejore la gobernanza comercial global y construya una economía mundial caracterizada por la apertura. El G20 debe seguir promoviendo la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC), rechazar el proteccionismo, y evitar la politización de las cuestiones económicas, la fragmentación intencional del mercado global y la aplicación del proteccionismo so pretexto del desarrollo verde y bajo en carbono.

El bloque ha de construir asociaciones de cadenas industriales y de suministro más equitativas, inclusivas y constructivas.

Cuarto, el G20 debe mejorar la gobernanza digital global y construir una economía mundial caracterizada por la innovación. Es importante que lidere la transición digital, la integración profunda entre la economía digital y la real y la elaboración de reglas en áreas emergentes.

Es necesario intensificar la gobernanza y la cooperación internacionales sobre la inteligencia artificial (IA), con el objeto de asegurar que la IA es para el bien y para todos. China auspiciará otra Conferencia Mundial de la IA en 2025 y acogerá la participación de los miembros del G20.

Quinto, el G20 debe mejorar la gobernanza ecológica global y construir una economía mundial amigable con el medio ambiente. Es importante adherirnos al principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas e implementar de manera integral y efectiva el Acuerdo de París y el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal.

Los países desarrollados han de ofrecer a los países en desarrollo el apoyo necesario en cuanto a fondos, tecnologías y desarrollo de capacidades. Se debe apoyar de manera conjunta a la conferencia en curso de la ONU sobre cambio climático y desertificación, para conseguir resultados positivos.

Es importante seguir el enfoque de «eliminar lo viejo después de haber establecido lo nuevo», sustituir estable y ordenadamente las energías tradicionales por las limpias, y acelerar la transición de la economía mundial hacia un desarrollo verde y bajo en carbono.

China está dispuesta a trabajar junto con las diversas partes para profundizar de continuo la cooperación internacional sobre la infraestructura verde, las energías verdes, la minería verde y el transporte verde, y va a proporcionar apoyo dentro de su alcance a los países en desarrollo.

La gobernanza global de la seguridad es parte integrante de la gobernanza global, dijo Xi, y añadió que el G20 ha de apoyar a la ONU y a su Consejo de Seguridad a jugar un papel más relevante, y al mismo tiempo, respaldar todos los esfuerzos conducentes a la solución pacífica de las crisis.

Es importante buscar una solución política a la crisis de Ucrania y trabajar para detener los combates y poner fin al conflicto de Gaza en una fecha próxima, así como proporcionar apoyo al alivio de la crisis humanitaria en la región y la reconstrucción de posguerra, afirmó.

Es menester aplicar la solución de dos Estados y restaurar los derechos nacionales legítimos de Palestina, añadió.

El G20 debe seguir comprometido con sus misiones fundacionales y partir de nuevo desde Río de Janeiro, llevar adelante las asociaciones, practicar el verdadero multilateralismo y abrir un hermoso futuro de desarrollo y prosperidad compartidos, afirmó Xi.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, presidió la reunión.

En la cumbre se adoptó la Declaración de Líderes de Río de Janeiro.

(Xinhua/Li Xueren)