Las firmas del sector aportaron U$S 1.880 millones en marzo. A pesar de eso, el Banco Central terminó el mes con saldo negativo. Se avecina la liquidación de la cosecha gruesa y no está claro el régimen cambiario.
Por: Marcelo Di Bari
@mdibari.bsky.social@mdibari
El sector agroexportador sumó en liquidación durante el mes de marzo U$S 1.880 millones, con lo que el acumulado del primer trimestre de 2025 suma U$S 6.134 millones. Las cifras representan un incremento de 20% y 26%, respectivamente, con relación a los mismos períodos del año anterior.
Los datos fueron suministrados por CEC y CIARA, los dos cámaras que representan a las grandes firmas acopiadoras de granos y a las que los procesan para obtener harinas, aceites y otros derivados.
El habitual informe adquirió este mes especial relevancia porque abarca una etapa que fue una debacle para el Banco Central: durante marzo la entidad debió sacrificar U$S 1.156 millones en el mercado oficial para cubrir el exceso de demanda. Además, sus reservas internacionales brutas cayeron en U$S 2.943 millones.
Si efectivamente y tal como dice el informe creció la oferta los agroexportadores, que son el sector más importante de la economía local en materia de generación de dólares (el 45% de las exportaciones del país, según el Indec), de allí se desprendería que la mala performance del Banco Central fue por una mayor demanda de los importadores, que apuraron sus pedidos de divisas para adelantarse al efecto de una devaluación, y de los bancos, que rearmaron sus posiciones en dólares por el mismo motivo.


Foto: Juan Mabromata / AFP
Así y todo, el monto fue 15% inferior al de febrero de este año, el primer mes completo en que se sintió el efecto de la baja de retenciones dispuesta por el Ministerio de Economía. Esa decisión estimuló la venta y posterior liquidación de divisas de granos que estaban retenidos a la espera de un mejor precio para el productor.
“El ingreso de divisas del mes de marzo es el resultado de la reducción de derechos de exportación bajo el Decreto 38/25, así como de una menor fluidez del mercado de granos con ventas a la exportación en los últimos días del mes de marzo”, señaló el comunicado conjunto de CEC y CIARA.
En busca de señales para la liquidación de la cosecha gruesa
El Gobierno necesita dar señales claras al sector de cara al inminente inicio de la liquidación de la cosecha gruesa (soja y maíz), que suele aumentar exponencialmente la oferta de dólares en el segundo trimestre del año.
Lo paradójico es que en vísperas de la temporada alta, nadie (incluyendo al equipo económico) puede ofrecer certidumbre de lo que ocurra en las próximas semanas, teniendo en cuenta la negociación en curso con el Fondo Monetario Internacional y los reclamos del organismo para la modificación del esquema cambiario. Esa falta de certezas provocó la dolarización de carteras y el rojo profundo con que la entidad monetaria cerró sus cuentas.


Actualmente, los exportadores liquidan el 80% de sus divisas por el mercado mayorista, con un precio fijado por el Banco Central, y el 20% por la operatoria conocida como contado con liquidación (CCL). Ese “blend” arrojaba este martes una paridad de $ 1.120,58 por dólar, según el cálculo de la Bolsa de Comercio de Rosario.
Como condición para suscribir un nuevo programa de ayuda financiera, el FMI exige un tipo de cambio más alto para estimular la liquidación de dólares y facilitar que el Banco Central acumule divisas. Con el mismo propósito pretende que la totalidad de los billetes sea vendida en el mercado oficial.
La reticencia del gobierno a devaluar provoca demoras en el acuerdo con el Fondo. A esta hora nadie sabe a cuánto cotizará el dólar la semana que viene y si el valor de ese momento resultará atractivo para que los agroexportadores liquiden normalmente. Si eso no ocurre, se aguardan más tiempos difíciles para el Banco Central.