Empresarios destacan las perspectivas que abre Vaca Muerta y auguran un importante superávit sectorial para el final de la década. También ponderan el potencial del litio y la minería en general.
El Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF) celebró este martes el 40° Congreso Anual bajo el lema “Confianza: Pilar esencial para una transformación decisiva”. En el evento, del que participaron empresarios, ejecutivos y candidatos políticos, se debatió acerca de la necesidad de recuperar los equilibrios macroeconómicos, realizar cambios estructurales en materia impositiva, consolidar reglas de juego claras para fomentar las inversiones y facilitar el acceso a los mercados de capitales, con el objetivo de aumentar la producción y potenciar el desarrollo económico. Uno de los puntos en común entre todos los disertantes fue la importancia de Vaca Muerta, el litio y la minería para el equilibrio económico en el corto plazo. En particular para el sector energético, uno de los expositores estimó que en 2030 exportará unos u$s25.000 millones.
Ricardo Markous, CEO de Tecpetrol, participó en el panel sobre la confianza para una transformación decisiva y destacó que la particularidad de estas elecciones es que todos los candidatos a presidente ven a Vaca Muerta como motor de desarrollo. “Es la segunda reserva de shale gas en el mundo, cuarta reserva en petróleo, y nos muestra que a pesar del desequilibrio macro, puede producir. Actualmente produce 300.000 barriles diarios, 45% de la producción del país, y 50 millones de metros cúbicos por día, 40% de la producción del país. Según nuestras estimaciones, subiendo la cantidad de equipos de 8 a 12, podemos llegar a producir 1.200.000 barriles en 2030, recuperando gran parte de los mercados de exportación regionales”, afirmó.
En esta línea, Markous detalló: “La energía impacta en la macroeconomía y ayuda a estabilizarla. El año pasado fue deficitaria por u$s5.000 millones, este año se logró un equilibrio y, según nuestras estimaciones, en 2030 esperamos u$s25.000 millones en exportaciones, contra u$s5.000 millones en importaciones, lo que daría una balanza altamente superavitaria”.
En cuanto a las inversiones actuales, Markous señaló que Tecpetrol dio el puntapié inicial del gas a la inversión estatal del gasoducto. Aseguró que la compañía invirtió u$s1.800 millones entre 2017 y 2018. Por otro lado, desde Tecpetrol invirtieron u$s150 millones a lo largo de cinco años en startups de empresas de energía de primera generación.
Desafíos para la Argentina
Entre los desafíos que destacaron los disertantes, el primordial fue la necesidad de estabilizar la macroeconomía, dar reglas estables y previsibilidad, con el objetivo de que la producción logre acceder al financiamiento internacional. Sobre este punto, Markous señaló: “Hoy el mercado financiero local ayuda a financiar el poco crecimiento que se puede tener, pero para proyectos grandes necesitamos acceder a los mercados de capitales, con lo cual necesitamos generar confianza para que el equity de las empresas de afuera venga, después los créditos multilaterales y, por último, el financiamiento internacional”.
Por otro lado, en el panel sobre la visión empresarial, Gustavo Grobocopatel, fundador y accionista de Grupo Los Grobo, destacó que “en todo el mundo hay discusiones sobre qué hay que hacer, pero estas no detienen el progreso” en relación con los debates sobre el modelo de país. Y amplió: “La mayor parte del mundo ha agotado el debate sobre el déficit. Mirando hacia adelante, el sector empresarial, además de preocuparse por su competitividad y productividad, vamos a tener que avanzar hacia otros temas que exceden a la empresa y que nos permitirán recrear un capitalismo moderno del Siglo XXI. Esta discusión se da en otras latitudes, aunque en Argentina se suma a los desequilibrios actuales. Hacia adelante, los empresarios también tendremos un rol público en la coconstrucción de un Estado de este tiempo”.
Fuente: https://www.ambito.com/
