El ministro del Interior Guillermo Francos y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, defendieron ese capítulo en comisiones. Los cuestionamientos de Unión por la Patria y el radical Lousteau.
En su exposición en el Senado de la Nación, en el marco del plenario de comisiones, el ministro del Interior, Guillermo Francos, puso énfasis en su defensa del capítulo del proyecto de Ley de Bases del gobierno nacional que establece la creación de un Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones(Rigi). y todos los cañones de los distintos bloques de la oposición fueron directo a criticar los beneficios ofrecidos en este punto de la norma.
El nuevo esquema, que implica el otorgamiento de beneficios para proyectos de más de 200 millones de dólares, contó con 136 votos afirmativos, 111 negativos y 5 abstenciones en la Cámara de Diputados.
Durante el debate, Francos trató de buscar aliados. Explicó que el Rigi es «un sistema que pretende atraer grandes inversiones para producciones mineras y petroleras”. El artículo 187 dispone que las importaciones para consumo de mercaderías o temporarias de las firmas adheridas al régimen estarán exentas de derechos de importación, el impuesto PAIS, tasa estadística (de jurisdicción nacional) y “de todo régimen de percepción, recaudación, anticipo, o retención de tributos nacionales o locales”. Eso incluye desde tasas municipales hasta el impuesto inmobiliario o el impuesto a los Ingresos Brutos, de recaudación provincial.
Asimismo, el ministro señaló que hay que preguntarle “a muchos gobernadores que tienen proyectos mineros qué le dicen en el mundo sobre el Rigi y la Ley de Bases que ya son muy conocidos porque están esperando que se apruebe. Hay mucho interés en inversiones. El inversor está esperando un acompañamiento de la clase política. El rumbo es claro”.
Foto: Prensa Senado
Francos negó que “el Rigi afecta la masa de coparticipación”, tras los cuestionamientos del senador puntano de Unión por la Patria Fernando Salino. “Diría que es todo lo contrario. Porque si no hubiera Rigi esas inversiones no vendrían a la Argentina. Entonces, al venir esas inversiones, crece toda la masa de impuestos coparticipables», aclaró.
Desde la oposición, Anabel Fernández Sagasti dio a entender que quien redactó el texto, “de federalismo, Constitución, no sabe nada”. “Debe haber salido de una oficina porteña, oscura”. Por su parte, la riojana Florencia López (UP) apuntó: “Esta cantidad de beneficios viene en contra posición a otras estructuras que tienen sobre las pymes. Me da vergüenza levantar la mano para un régimen a grandes inversiones y tener que decirle a las fábricas de mi provincia que no hay nada para ellos”, agregó.
El secretario de Hacienda, Carlos Guberman, respondió que “el Rigi es optativo. Las provincias pueden adherirse o no. Si la provincia decide adherir, no puede incrementar su carga tributaria, pero no va a resignar impuestos».
Por su parte, el radical Martín Lousteau pidió explicaciones respecto a cuestiones técnicas de la implementación del Rigi. Planteó asimetrías en comparación con el lado local. En ese punto, le respondió Guberman: “Argentina es mucho más caro que lo que pasa en Perú y Chile. El costo fiscal es de 55%, mientras que en Chile fueron de 35% el año pasado y ahora subieron al 43%. En Perú, es del 38-39%. Es mucho más caro acá. El RIGI lo llevaría al 35%, más o menos 36%, siempre y cuando las provincias acompañen y no generen cargas adicionales sobre lo que estamos proponiendo. Si la provincia adhiere, la empresa va a poder tener los beneficios; si no, difícilmente lo haga, si no tiene esas garantías”.