El frío del otoño nos cayó con fuerza sobre nuestros cuerpos cuando los demonios desataron la sentencia sobre Cristina. No por no esperada, pero siempre uno guarda la esperanza que la reflexión de al menos uno haga que las aguas vuelvan a un cauce de normalidad. Pero no, el partido judicial en una clara alianza con el partido gobernante y acatando ordenes de los Estados Unidos de Norteamérica ejecutaron el mandato.
No alcanzó con armar un juicio plagado de inconsistencias, no alcanzo con hacerla responsable de manejos muy alejados de su responsabilidad directa. NO, la debían poner como una corrupta que encabezaba una banda para delinquir, debían vapulearla, ofenderla, menospreciarla, hacerla desaparecer del amor de su gente.
El mismo abogado que hoy es Ministro de Justicia, el Dr. Cuneo Libarona se expresó con total claridad sobre este juicio marcando la inexistencia de pruebas concretas y lo amañado del asunto. Muy parecido (oh casualidad) al juicio que en su oportunidad llevo adelante el Juez Sergio Moro en Brasil y que termino con la prisión del Presidente Lula por dos años y medio. Ese juicio se cerró con una afirmación fuera de toda norma legal, dijo: “Es mi íntima convicción” de su culpabilidad. Aquí se usó la misma fórmula calcada.
Digno de destacar la entereza con que Cristina reaccionó, sin una palabra agraviante, sin un insulto, sin buscar poner al pueblo en contra de la aberración jurídica sufrida,sino por el contrario,decía: “Es el momento de ayudar a los que más lo necesitan”, “los dirigentes tienen que estar allí donde se debe organizar nuestro partido, desde abajo”…. Y el pueblo recibió el mensaje de amor con más amor, y demostró porque es una líder indiscutida e indiscutible.
Los más conspicuos líderes del mundo salieron de inmediato a apoyarla. Setenta partidos de Latinoamérica claman por su liberación. Europa se manifiesta de igual manera y con mucha energía bajo la consigna “CRISTINA LIBRE”.
Quedo claro que utilizar la justicia como una herramienta de persecución política para encarcelar y proscribir adversarios son métodos fachistoide. Pero el poder judicial se maneja al servicio del poder real local y foráneo y siempre respondiendo a su condición de clase. Una vez más se equivocaron, parieron un MITO, una leyenda que inscribieron en la historia al lado del general Perón y nadie la puede bajar de donde está instalada para el pueblo que día a día le expresa su amor como puede, de la forma que le sale y seguirá haciéndolo porque el amor vence al odio. La empatía entre la líder y su gente es inclaudicable, es innegociable, y ellos la hicieron eterna.
No nos engañemos, todo esto estaba perfectamente planificado, la ida de Milei a recorrer el mundo mientras aquí sus secuaces ejecutaban la maniobra que debía coincidir con el partido de futbol que disputaría la selección nacional, (como distracción).Y mientras tanto, en el medio del caos provocado, endeudaban el país de una forma agraviante: U$S 1000 millones al 32,5% , U$S 2.000 millones al 8,25%, U$S 500 millones vaya a saber a qué tasa y nada alcanza, es más lo que sale que lo que entra y nos quieren convencer que vamos bien, que esta economía es la mejor del mundo y que el Toto es un maestro porque logro bajar la inflación al 1,5% en mayo. ¿Alguien cree este verso infame?
Estamos a las puertas del fin de la Patria y cada argentino que sienta el orgullo de pertenecer debe salir a defenderla, estos sátrapas vinieron por Cristina, mientras se roban hasta la soga de colgar la ropa, mientras liquidan los hospitales, mientras liquidan la educación, mientras aniquilan la obra pública y terminan con los que nos queda de soberanía.
Los empresarios PYMES no podemos ni queremos quedarnos callados, saldremos a la calle a defender nuestros derechos que son los de todos, acompañaremos a Cristina a Comodoro Py el día miércoles 18 como lo harán todos los que sienten vergüenza ajena por tener los poderes que tenemos, el régimen que tenemos.
La Patria está en peligro y nuestro esfuerzo por defenderla siempre será bien recompensado por la historia. No podemos seguir tolerando las injusticias, que nos metan el dedo en la oreja, que insulten groseramente a nuestra gente y que de a poquito nos quiten los derechos que supimos conseguir.
Raul Hutin/Secretario de la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN)
