Edición n° 2952 . 21/12/2024

La derecha te lo dice clarito: Dante Sica propuso forzar una «modernización» de los convenios laborales

La flexibilización como única receta

El ex ministro de Industria del macrismo y actual asesor de Patricia Bullrich, sugirió suspender la ultraactividad de los convenios colectivos de trabajo para forzar su revisión y reducir el costo de las indemnizaciones. El antecedente de la ley Banelco.

El ex ministro de Industria del macrismo, Dante Sica, aseguró este miércoles que si Juntos por el Cambio gana las elecciones buscará “suspender temporalmente el concepto de ultraactividad para que todos los convenios colectivos de trabajo se modernicen”. Los convenios colectivos de trabajo tienen un determinado tiempo de duración. En la actualidad, si ese plazo se cumple y las partes no negocian uno nuevo se mantiene el actual. Lo que garantiza eso es el concepto técnico de ultractividad, consagrado en el artículo 6 de la ley 14.250, que Sica propone suspender para forzar una flexibilización de las condiciones laborales. Además, remarcó que es necesario reducir el costo de las indemnizaciones

“Los convenios colectivos forman parte del corazón del modelo sindical y lo que uno tiene que hacer es tratar de renovarlos. ¿Cuál es el problema de los convenios? No es el convenio en sí mismo. Nadie quiere sacar los convenios. Lo que hay que tener son contratos modernos que expresen las realidades productivas del mundo laboral”, aseguró el economista, quien asesora a la candidata presidencial Patricia Bullrich.

“De la totalidad de los convenios colectivos, el 50 por ciento son de antes de la década del 80. Están regulando actividades en un mundo totalmente distinto. Hay convenios de 1975 y cuando se miran las categorías laborales ya ni existen o la normativa a la que se ajustan no tiene nada que ver con la dinámica de la nueva tecnología en el mundo laboral. Hay que acelerar la renovación de todos los convenios colectivos”, agregó en declaraciones a radio Con vos.

Cuando le preguntaron cómo haría para acelerar esa renovación, Sica aseguró que una forma es suspender temporalmente el concepto de ultraactividad. “Hay que hacerlos mejor adaptándolos a las nuevas condiciones laborales. Hay una dinámica distinta. Antes uno entraba al mundo laboral y pensaba que iba a tener uno o dos puestos de trabajo en toda su vida. Hoy va a tener 12 puestos de trabajo en toda su vida. Hay que reconocer movilidades dentro de las nuevas condiciones y hay que adaptar los marcos laborales a esas condiciones”, remarcó.

Sica también aseguró que es necesario avanzar con una reforma laboral que reduzca el costo de las indemnizaciones. “Hay que bajar los costos de incertidumbre con respecto a la salida laboral”, remarcó y luego profundizó en el tema: “Hay que limpiar un montón de regulaciones que hay generando lo que caricaturescamente se conoce como la industria del juicio. Hay que dar mucha claridad y certeza con respecto a los costos, tanto de entrada como de salida”.

Críticas a Sica

El especialista en derecho laboral Luis Campos cuestionó la propuesta de Sica desde su cuenta de Twitter: “¿Por qué es importante la ultraactividad? Los convenios colectivos de trabajo solo pueden reconocer mayores derechos que los establecidos en la ley (más vacaciones o licencias, menos jornada, más delegados, etc.). Si el convenio se cae, volvemos a los pisos establecidos en la legislación general. Suspender la ultraactividad implica poner a los sindicatos entre la espada y la pared: o modifican las cláusulas de los convenios colectivos incluyendo reclamos de los empleadores, o se cae el convenio y se pierden todos los derechos que estén por encima de la ley”, aseguró.

“¿Algunas cláusulas que se caerían si no se negocia un nuevo convenio colectivo de trabajo? Casi todos los adicionales salariales (antigüedad, zona desfavorable, título, etc.), vacaciones y licencias que están por encima de la ley (cuidados familiares entre otras), cantidad de delegados, entre otras”, agregó Campos, quien coordina el Observatorio del Derecho Social en el Instituto de Estudios y Formación de la CTA – Autónoma.

La última vez que se intentó hacer lo que propuso Sica fue durante el gobierno de la Alianza, en el año 2000. “Los que peinamos canas tenemos muy presente la Ley Banelco, sancionada en 2000. Googleen la renuncia de Chacho Álvarez, sobornos en el Senado, la humanidad de Julio Piumato. El art. 28 de aquella ley repite letra por letra lo que dijo Sica”, sostuvo Campos. 

Por último, Campos negó que sea necesario actualizar los convenios para mejorar las condiciones laborales de los millones de trabajadores informales. «Menos derechos para un trabajador petrolero de Chubut no van a mejorar la situación de millones de trabajadoras de casas particulares o del agro», concluyó.