Cuando nos situamos en tiempo y espacio, la Argentina de hoy es la Argentina de antaño. Un país forjado por un desarrollo desigual y combinado que avanza y retrocede en materia económica, social y ambiental.
Por Matías Strasorier y María Rizzo*
J. W. Cooke decía que “Las clases dominantes argentinas durante mucho tiempo no solo fueron instrumento material del capital extranjero (…) además del dominio económico había un dominio intelectual. No sólo se los dominaba por medio de la economía, se les creaba una mentalidad típica de indefensión, una mentalidad de entrega”.
En la actualidad, hay un neocolonialismo, un neoliberalismo de “nueva fase”. Aquí y ahora vemos un retroceso que le duele a la profundidad de nuestra federalidad, un retroceso para quienes producen y trabajan, que no da tregua. Nuevos formatos o viejos, habrá que analizarlos, en definitiva, formatos que expolian riquezas a diestra y siniestra. Venimos observando como los instrumentos de política judicial, fiscal y económica engendran una maraña de redes que tejen maniobras para evadir y fugar nuestras riquezas, llámese granos, carnes, litio, dólares, o LINGOTES DE ORO… si lingotes de oro, así como lo ves.
Los datos de la realidad son desfigurados o tergiversados con el fin de NO reflexionar sobre las cuestiones de fondo. Observamos que el SMVM, sufrió una caída brutal en los meses transcurridos del gobierno de Javier Milei. El salario mínimo de hoy, $ 234.215, y que no se actualiza desde el mes de mayo, tiene un poder de compra un 32,1% menos del que tenía en noviembre de 2023.
En Argentina, el SMVYM (Salario Mínimo Vital y Móvil) no alcanza a cubrir las necesidades básicas, entre ellas por ejemplo para comparar carne, entre otros productos de la canasta básica. Según un informe publicado por CICCRA, la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes, en los primeros seis meses de este año, el consumo de carne bovina se redujo 16,7% ubicándose en el nivel más bajo de los últimos 13 años. En tanto, si se considera sólo el mes de junio, el volumen de ingesta diaria es el más bajo de los últimos 19 años. En cuanto al promedio del primer semestre de 2024, fue de 44,7 kilogramos por habitantes.
La mesa de las y los argentinos viene en franco retroceso, para el caso de la leche y el pan, el consumo cayó también en este primer semestre: El consumo de leche fluida, en la primera parte del año, cayó un 19,6% y el de leche en polvo, un 30,4%, en comparación con el mismo período del año pasado. Asimismo, desde los sectores panaderos advierten una merma del 45% en la venta de pan.
Mientras que Caputo, el Ministro de Economia, dice que los argentinos deberán vender sus dólares para pagar servicios. Es parte de la historia, de la lucha histórica en la Argentina, entre Patria y Colonia, Patriotas y Colonizados. Volemos a citar a J. W. Cook:
“La clase dirigente entregó todo al extranjero, todo cuanto éste exigió, desde el manejo de la moneda y el crédito, hasta el monopolio de los transportes (…) extranjeros eran los ferrocarriles, los teléfonos, el gas, los frigoríficos trustificados que controlaban las exportaciones de carnes, las empresas de comercialización de cosechas, los tranvías, ómnibus y subterráneos”. (Obras Completas, Tomo V, Ed Colihue)
Hoy ese “extranjero” se llama Black Rock, Elon Musk, Mark Zuckerberg, FMI, Donald Trump, Cargill, Bunge, COFCO, Viterra, etc. Ya no es la vieja Inglaterra, ni EE.UU., ni China, hoy no hablamos de Estados Nación, hablamos de tejidos muchos más complejos que van en búsqueda de territorios para arrasarlos. Si no, miremos Ucrania, Palestina, África, la misma Latinoamérica, el capitalismo de la nueva fase, encontró la forma de seguir generando extraordinarias tasas de ganancia a costa de nuestra fuerza productiva, de nuestro intelecto general.
Estamos frente a una clase dirigente que sabe muy bien lo que hace, no son improvisados, tienen un plan y lo vienen congeniando desde antes del nacimiento de nuestra Patria. No quieren una Argentina ni productiva, ni sustentable, ni mucho menos federal ni inclusiva. Nos preguntamos, hasta cuando le seguirán sosteniendo estas “ideas” al gobierno (que les viene prometiendo espejitos de colores y no cumple nada), a los señores de la Sociedad Rural Argentina, la AEA, la UIA.
Hablar de economía, es una tarea de la batalla de IDEAS, y hablaremos hasta el cansancio porque debemos entenderla para poder transformarla. Definitivamente necesitamos no solo un pueblo con coraje, que bastante muestra de tenerlo ha dado, sino una dirigencia política dispuesta avanzar en favor de los intereses de la Patria, para seguir conformando una fuerza social, un bloque histórico que le contraponga un programa no solo de gobierno, sino un programa para una PATRIA que de una vez y para siempre deje de ser colonia.
*Strasorier es Director del Centro de Estudios Agrarios, Argentina. Maestrando en Estudios Sociales Agrarios (FLACSO) y Analista agropecuario. Rizzo es co-Directora del Centro de Estudios Agrarios, Médica Veterinaria, maestranda en Desarrollo Regional y Políticas Públicas de FLACSO y analista agropecuaria.