Edición n° 2910 . 09/11/2024

Fuentes Seguras. La coalición del Mar Caspio

El debate sobre la moneda única latinoamericana y el Banco del Sur. El despliegue de Venezuela, a través de un sendero desmalezado por Turquía. Rusia e Irán. Estados Unidos y su vida interior. Biden en Israel y Palestina. El futuro.

Por Gabriel Fernández *

Varias situaciones marcan la actualidad internacional. Las mismas se desplazan en el tiempo como procesos y desembocan en el caudaloso río del futuro. Como sucede con los afluentes, tienen orígenes distintos. Es difícil observarlas en tanto parte de un mismo período, pues la vibración que el agua genera al impactar con las rocas atrapa la atención y parece un fenómeno en sí mismo. Lo específico opaca a lo general. Sin dejar de aprehender los rasgos de cada brazo, intentaremos mostrar el cauce y su rugir. Arranquemos por las cercanías.

BANCO Y MONEDA. El próximo 2 de Octubre se concretarán las elecciones en Brasil. Como los sondeos y el ambiente sugieren una victoria de Luiz Inacio Lula da Silva, cabe adentrarse en una de las propuestas que más conmocionó a la región en los meses recientes. La idea de una moneda única latinoamericana fue abordada por dos economistas ligados al Partido de los Trabajadores en un reciente artículo publicado en el diario Folha de Sao Paulo. Allí, Gabriel Galípolo, ex presidente del Banco Fator y colaborador del candidato, y Fernando Haddad, ex alcalde paulista y aspirante a la gobernación estatal, re lanzaron la idea.

El germen de la misma se asienta en el modelo adoptado por el bloque europeo con el euro, como una forma de aumentar la integración regional y fortalecer la independencia monetaria de la región. El planteo resultó vigoroso cuando el propio ex jefe de Estado afirmó que “no tenemos que depender del dólar”. Sin embargo, la ausencia de precisiones en el decir de Lula abrió el juego para un debate que se desliza en el interior de las fuerzas latinoamericanistas. El economista ecuatoriano Pedro Páez, quien instrumentó la iniciativa del ex presidente Rafael Correa para diseñar el Banco del Sur y la moneda única, presentó sus objeciones.

Páez sugirió que las complicaciones de una moneda sub continental son enormes y que la adopción del esquema europeo tiende a disciplinar y por tanto a perjudicar a las naciones de menor volumen. Es más, aseguró que el euro ha resultado una “aberración”. Los países que la adoptaron suscribieron un documento, el Tratado de Maastricht, que los obliga a cumplir una serie de condiciones (criterios de convergencia). Esta construcción, sostuvo, llevó a la aplicación de un “ajuste neoliberal permanente”, causando “graves perjuicios” sobre la población y aumentando la desigualdad entre países.

El debate se va encarrilando en una dirección interesante. Por un lado emerge en varias áreas económicas de los Estados latinoamericanos la voluntad de forjar una entidad crediticia común y hay coincidencia en llamarla Banco del Sur. Por otro, empiezan a admitirse las diferencias estructurales de los numerosos protagonistas de su gestación. Así, se registran acuerdos generales sobre la importancia de contar con una casa financiera que aporte recursos para obras de infraestructura y emergencias al interior de la zona, pero se avanza en la elaboración de propuestas para que las operaciones bilaterales se concreten mediante una combinación de las dos monedas en acción.

La iniciativa está relacionada con la manifiesta decisión de México y la Argentina de fomentar la integración regional con epicentro en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y es probable que se adopten dos herramientas perfiladas durante el previo despliegue de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur): el Fondo del Sur, una institución de apoyo a la provisión de liquidez de los bancos centrales, tal como lo hace el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero sin la imposición de condiciones draconianas, y un Sistema Unitario de Compensación Regional (Sucre), para facilitar las transacciones entre los países de la región —comerciales y financieras—, y evitar el uso de la divisa estadounidense.

Entonces, lo que viene según nuestras Fuentes Seguras, es un sendero que incluye la progresiva articulación política, la amalgama de intereses hasta arribar a un banco regional y la elaboración de los instrumentos adecuados para una interrelación equilibrada. Sin fusiones y sin moneda común. La concepción ya ha despertado alarmas en el gobierno de los Estados Unidos, que visualiza –con sólido diagnóstico- un debilitamiento del dólar en su patio trasero. La concreción de estas propuestas tendrá que afrontar las fuertes presiones del poder norteño destinadas a su desmembramiento antes de nacer.

VENEZUELA, TURQUÍA. Seguimos en el barrio. Como si las preocupaciones estadounidenses resultaran escasas, junto a la perspectiva estratégica antes narrada deberá afrontar, en lo inmediato, el movimiento más temido: la consolidación de la Revolución Bolivariana a través de la expansión de vínculos exteriores. Por estas horas, mientras usted transita estas líneas, lector, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, visita Caracas y se reúne con su par Nicolás Maduro. El objetivo es establecer firmes vínculos bilaterales y respaldar a la hostigada nación suramericana en este momento de la historia, abriendo un sendero que pueda ser recorrido por otros países del globo.

Como sabemos, desde el fallido golpe de Estado en Turquía en 2016, Erdogan se ha acercado de modo zigzagueante a Moscú, sin abandonar su carácter de miembro activo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Este año su país ha operado con sensatez entre Ucrania y Rusia, en los flancos político y alimentario. Asimismo, se ha convertido en un aliado de Venezuela en la implementación del Programa de recuperación económica iniciado en agosto de 2018, cuando arreció el bloqueo y se le cortaron las líneas de crédito.

La Casa Blanca viene intentando un juego difícil de jugar: sostener el asedio a la patria de Hugo Chávez por razones políticas pero abrir una senda de negociación para adquirir su petróleo. La guerra en Eurasia, impulsada por el bloque anglosajón que conduce la OTAN, aminoró la provisión del combustible sobre Occidente, y Venezuela posee las mayores reservas del planeta. La contradicción se hizo muy visible en los dos meses recientes: mientras los Estados Unidos enviaban misiones de alto nivel a Caracas para activar el vínculo comercial que ellos mismos anularon, excluyeron al gobierno de Miraflores de la Cumbre de las Américas, desatando protestas canalizadas por el presidente argentino Alberto Fernández.

Pocos lo informaron, pero ahora lo hace este periodista: durante la reunión del G7 efectuada el mes pasado, el gobierno francés presentó un documento exigiendo el reingreso de Venezuela como proveedor de petróleo a Europa. Los Estados Unidos ignoraron la demanda y siguieron ofreciendo un abastecimiento cinco veces más caro que el originado en Rusia. Por eso en varias secuencias previas de esta columna se indicó que la oleada de sanciones terminaría por perjudicar a los sancionadores. Es que la potencia en caída que ¿lidera? Joseph Biden grita más fuerte de lo que sus pulmones admiten.

Vale recordar que durante la Cumbre de las Américas Maduro viajó a Ankara para reunirse con Erdogan. Allí se terminó de elaborar la agenda que se plasma por estas horas; pero también visitó cinco naciones asiáticas y africanas, robustas en el mundo petrolero y energético: Irán, Argelia, Kuwait, Catar y Azerbaiyán. La lista no es vana: todos poseen buenos vínculos con Turquía y pertenecen a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Por eso en la semana que pasó el presidente norteamericano se acercó a Ryad: la progresiva integración saudí al BRIC y su brumosa actitud frente al conflicto en Ucrania hacen temblar a Washington.

EL MAR CASPIO. En uno de los artículos recientes apuntamos que el Mar Caspio debía ser considerado con especial atención. Bien, después de mucho diálogo y tras esquivar tensiones occidentales para dañar el proyecto, Rusia, India e Irán consolidaron una ruta comercial a través de ese gran lago integrador. Se trata del Corredor Internacional de Transporte Norte-Sur (INSTC). Como bien apunta el analista internacional Pepe Escobar“el INSTC, en pleno funcionamiento, señala un poderoso sello de la integración euroasiática, junto con la Iniciativa de la Franja y la Ruta de la Seda, la Organización de Cooperación de Shangai, la Unión Económica Euroasiática y, por último, lo que describí como «Pipelineistan» * hace dos décadas”.

Hace dos semanas el presidente ruso Vladimir Putin visitó Ashgabat, la capital de Turkmenistán, donde participó de la VI Cumbre del Caspio. Por un lado, fue sorprendido por el regalo que le entregó su colega Serdar Gurbanguliyevich Berdimuhamedov: un cachorrito alabai de cría doméstica, derivado del perro pastor de Asia Central y calificado como parte del patrimonio natural turkmeno. Por otro, profundizó la asociación estratégica entre Rusia y los Estados ribereños del Caspio: Azerbaiyán (oeste), Kazajstán y Turkmenistán (este) e Irán (sur). Este cronista piensa que, sin desdeñar el gesto afectivo, el jefe ruso priorizó el último aspecto citado.

¿Qué acordaron los mandatarios presentes? Prohibir de modo terminante la presencia de naves de guerra y bases de la OTAN en la región. Es difícil transmitir desde Buenos Aires la trascendencia de la determinación. Puede intentarse así: Asia Central se ha consolidado como una región articulada política y económicamente, donde cada nación despliega una actividad económica creciente reflejada en la activación de su dinámica interna, de sus comercios exteriores y del incremento del segmento industrial dentro de la configuración de sus PBI. La zona es crucial para el mercado mundial de energía, con grandes reservas de petróleo y gas natural; ocupa el tercer sitio en el mundo en cuanto a reservas de hidrocarburos, después del Golfo Pérsico y Siberia.

Azerbaiyán, Kazajstán y Turkmenistán están coaligados bajo un admitido y benéfico comando dual que imbrica Moscú y Teherán. El Mar Caspio está conectado al Mar Negro por canales del Volga construidos por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Entonces, además de servir como corredor comercial, el lugar opera como dársena para embarcaciones con armamentos: la clave está en que pueden trasladarse rápidamente hacia el Mar Negro. Como apuntamos en textos previos, el Mar Negro está ubicado entre Europa Oriental y Asia Occidental, entornado por los Balcanes, la estepa póntica, Crimea, el Cáucaso y la península de Anatolia. De allí se pasa al estrecho del Bósforo … ¡controlado por Turquía!

Hay otros datos para ayudar a la comprensión. Turkmekistán tiene como principal comprador de su gas a ChinaAzerbaiyan, al acordar este camino, deja de lado la propuesta de la desesperada Unión Europea para advenir en proveedor alternativo de combustible y desplazar a RusiaKazajstán, tras la ofensiva que sufrió con la intención de quebrar su ligazón con Moscú, ratifica el posicionamiento. Irán puede sonreír tranquilo cuando se diseminan las versiones sobre el temor que genera en los alrededores.

Como bien puntúa Escobar“La política exterior de Irán bajo el mandato del presidente Ebrahim Raisi está claramente en una trayectoria euroasiática y del Sur Global. Teherán se incorporará formalmente a la OCS como miembro de pleno derecho en la próxima cumbre de Samarcanda en septiembre, mientras que se ha presentado su solicitud formal de adhesión a los BRICS. Purnima Anand, directora del Foro Internacional de los BRICS, ha declarado que Turquía, Arabia Saudí y Egipto también están muy interesados en unirse a los BRICS. Si esto ocurre, en 2024 podríamos estar en camino de un poderoso centro de Asia Occidental y África del Norte firmemente instalado dentro de una de las instituciones clave del mundo multipolar”.

Como todo debe tener un moño para mostrar la elegancia de las elaboraciones, la semana que empieza a despuntar permitirá enfocar otro cónclave trascendente: Vladimir Putin viajará a Teherán, donde se llevará a cabo una reunión trilateral entre Irán, Rusia y Turquía.

Ahora bien, resulta pertinente incluir un dato esencial para insertar, desde el Mar Caspio, la reyerta sorda que sostienen los Estados políticos europeos con la OTAN. El asunto es así: mientras Rusia e Irán facilitan inversiones de infraestructura energética a las naciones de Asia Central, Europa no puede hacerlo porque está forzada por el atlantismo dominante a invertir enormes volúmenes de recursos en Defensa y en respaldo a la ruinosa guerra que Kiev desarrolla a pesar de la victoria rusa sobre el Donbas. Lo que surge es una complementación intensa entre China y Rusia, que no vacilan en adecuar sus proyectos para hilvanarlos con los de su aliado. Esto incluye asuntos estratégicos demasiado importantes que analizaremos en ediciones futuras: hacia “arriba”, en el espacio y hacia “abajo”, en el Artico.

AUDIOS Y VIDEO. La semana que concluye dejó bastante tela para cortar. Eso se percibe en este artículo, pero también en el aire y el video de La Señal. Dialogamos con dos especialistas centrales a la hora de aportar información y ahondar en la misma: Juan Constant y Juan Francisco SotoEl primero apuntó sobre la situación interna de los Estados Unidos, presentando con detalle algunos factores que deben ser tomados en cuenta para absorber una realidad que por momentos parece increíble. Invitamos a escucharlo aquí:  https://ar.radiocut.fm/audiocut/juan-constant-hay-alianzas-tacticas-entre-globalismo-y-gobiernos-nacionales-en-latinoamerica/?fbclid=IwAR056BaU7M_9z_hnU4mRNqVf3n1ovdyr31O_U8IBj_g0xmQfYHtRUFPI-FE

Soto se refirió a la gira de Biden por Israel y Palestina. ¿Cuál es el objetivo del gobierno norteamericano al presentarse en esa zona? A partir de la respuesta a ese interrogante el analista relaciona esta acción con el panorama internacional y los alineamientos que se van desplegando en el marco de la situación ucraniana. Sugerimos escucharlo aquí: https://ar.radiocut.fm/audiocut/juan-francisco-soto-hace-joe-biden-en-palestina-e-israel/?fbclid=IwAR39ufYecACi5qjCjux1N4W6HKFe9Ixwhh1rlJpo8A-5dNtslkTMb0m02XI

Finalmente, mientras preparamos la bebida verde e intentamos descansar del múltiple y a la vez potente caudal informativo, retomamos una de las notas que más sorpresa causó y la transformamos en diálogo con el objetivo de proyectar sus derivaciones: Terraformar la Tierra.

Primero, sugerimos escuchar este audio, que puede interesar. Se trata de un diálogo a fondo con el geógrafo y analista internacional Néstor Gorojovsky al respecto: https://ar.radiocut.fm/audiocut/otra-ecologia-dialogo-entre-nestor-gorojovsky-y-gabriel-fernandez/

Luego, el video. ¿De qué trata? Bueno, lo hemos sub titulado así:

Lo que está en juego actualmente. Los conceptos que resulta necesario desplazar, para entender. La rareza de la vida, la singularidad del planeta y la presencia humana como parte de la naturaleza. La energía. Los avances científico técnicos y la industria. La propaganda reactiva, vestida de progresividad. Varias verdades ocultas.

https://www.facebook.com/100001453370799/videos/7755538731184327/

Vale pensar estos temas ¿no? Reúnen la inquietud que suscita el presente arrollador con otra, más profunda. Nos llevan a indagar en el futuro de la especie. No son Crónicas Marcianas, aunque valoremos algunos episodios; son Crónicas Terrestres, y están más cerca de lo que suponemos.

  • Area Periodística Radio Gráfica / Director La Señal Medios / Sindical Federal

Foto, mapa y pinturas. Mar Caspio

*En informática, una tubería (pipeline) es en una cadena de procesos conectados de forma tal que la salida de cada elemento de la cadena es la entrada del próximo. Permiten la comunicación y sincronización entre procesos.

Fuente: Radio Gráfica