Por ciertas exigencias de calidad del mercado interno y externo, se descarta fruta de producción rionegrina que se encuentra en buenas condiciones para su procesamiento y consumo. Un emprendimiento gastronómico comenzó a darle un uso con certificación de manipulación de alimentos fabricando dulces.
A fines del 2010, en medio de un contexto de crisis económica, un grupo de vecinas de la localidad rionegrina de Fernández Oro se convocó con el objetivo de ayudar a mujeres y sus familias que atravesaban un momento crítico, cocinando dulces y enseñando a hacerlos.
En esas primeras reuniones las 19 mujeres que participaban observaron que el valle es muy productivo, pero se desperdiciaba mucha de la fruta que se obtenía.
En diálogo con Radio Gráfica, la presidenta y fundadora de la Cooperativa de Trabajo Mujeres de Oro en Acción Limitada (MOA), Natalí Melo, contó que muchas de esas frutas se desechaban porque no cumplían con las exigencias del mercado interno y externo, además porque tampoco contaban con industrias que pudieran aprovecharlas. “Si cae granizo a una manzana no se la puede exportar, pero un dulce sí puede hacerse (…). Hace 13 años que venimos trabajando, estamos haciendo muchas variedades de dulces, con la expectativa de hacer conservas”, dijo Melo.
Las cooperativistas elaboran dulces y conservas, sus productos no contienen ningún agregado, solo fruta y algo de azúcar. En la actualidad tienen registrados trece productos y están trabajando para incorporar y registrar productos salados como aderezos, salsas y legumbres. Desde la entidad resaltan que la idea es fortalecer y estimular el consumo de verduras y frutas del Valle Patagónico.https://ar.radiocut.fm/audiocut/embed/mini/recorrido-cooperativa-trabajo-mujeres-oro-en-accion/
Además, la entidad solidaria cuenta con un emprendimiento local, trabajan de manera articulada con otras cooperativas que están emplazadas en el complejo agroindustrial, tienen contacto con emprendedores y emprendedoras y también participan de la mesa de asociativismo.
En el valle hay mucho movimiento de la economía social y solidaria, de hecho, es el primer municipio cooperativo que se conformó recientemente a partir de un proyecto que nació desde la cooperativa y se replicó en cinco localidades más. Que sea cooperativo significa e implica una articulación entre el municipio y las cooperativas, lo que permite generar oportunidades y trabajar en conjunto.
La presidenta de MOA explicó que además de hacer dulces gestionan microcréditos para personas emprendedoras y hace pocos días celebraron con una cena show un nuevo aniversario del que participaron muchas mujeres entre ellas las socias fundadoras Ines, Olga y Almita. “Hay un grupo de mujeres que se ponen al hombro todo el trabajo y tienen muchas ganas de emprender y contagian con su energía”.
Fuente: Radio Gráfica.
