En el informe se exhibe que una mayoría de argentinos considera que las frases dichas por el mandatario recientemente son mentiras. Cómo está la imagen de Milei y qué confianza hay en las instituciones.
Según la última encuesta de Zuban Córdoba y Asociados, el 57 por ciento de los argentinos desaprueba la gestión de Javier Milei. La credibilidad del presidente está en caída libre: un 69 por ciento señala que Milei miente cuando sostiene que aplicó la motosierra “a la política y no a la gente”, mientras que un 70 por ciento opina que gobierna en beneficio de los ricos.
La consultora tomó una serie de frases dichas por el presidente y preguntaron a los encuestados si dice la verdad o miente. “Hace cuatro meses que los salarios le vienen ganando a la inflación”, dijo Milei pero para el 68 por ciento, es una mentira. “Estamos arrasando con la inseguridad” (para el 62 por ciento, mentira); “Las jubilaciones le están ganando a la inflación” (mentira para el 71 por ciento); “Está mejorando el empleo (mentira para el 68 por ciento). La frase presidencial considerada más mentirosa fue “Las tarifas de la luz, el gas y el agua están regaladas” (76 por ciento).
Según la última encuesta de Zuban Córdoba y Asociados, el 57 por ciento de los argentinos desaprueba la gestión de Javier Milei. La credibilidad del presidente está en caída libre: un 69 por ciento señala que Milei miente cuando sostiene que aplicó la motosierra “a la política y no a la gente”, mientras que un 70 por ciento opina que gobierna en beneficio de los ricos.
La consultora tomó una serie de frases dichas por el presidente y preguntaron a los encuestados si dice la verdad o miente. “Hace cuatro meses que los salarios le vienen ganando a la inflación”, dijo Milei pero para el 68 por ciento, es una mentira. “Estamos arrasando con la inseguridad” (para el 62 por ciento, mentira); “Las jubilaciones le están ganando a la inflación” (mentira para el 71 por ciento); “Está mejorando el empleo (mentira para el 68 por ciento). La frase presidencial considerada más mentirosa fue “Las tarifas de la luz, el gas y el agua están regaladas” (76 por ciento).
La imagen del gobierno
La desaprobación del gobierno está en aumento y llegó al peor punto de los últimos seis meses, con un 57 por ciento de rechazo. Milei mantiene todavía un 42 por ciento de aprobación, pero cada vez es menos la gente que cree que el país va en la dirección correcta (hoy es un 39 por ciento, cuando hace seis meses era el 47 por ciento).
De hecho, lo que prima es la falta de expectativas en que la situación económica mejore: el 57 por ciento cree que dentro de un año el país estará igual de mal o peor, mientras que los que piensan que estará mejor o igual de bien son apenas el 35 por ciento.
A la pregunta de por qué Milei no cumplió todavía con su promesa de dolarizar, las opciones más elegidas fueron “porque no puede” (41 por ciento), “porque fue una promesa y nada más” (32 por ciento) y “porque no sabe cómo” (13 por ciento).
La medida más valorada del Gobierno es la reducción del déficit fiscal, en una muestra de que uno de los principales ejes discursivos de Milei para justificar el ajuste sigue concitando apoyos.
A su vez, la consultora hizo una pregunta abierta sobre cuál es el mayor logro del gobierno. La respuesta con más menciones fue bajar la inflación (18 por ciento).
La defensa de la educación pública
La encuesta indagó sobre el grado de confianza o desconfianza en las instituciones. Las universidades públicas y la salud pública concitan los mayores niveles de confianza, con el 71 por ciento de menciones positivas. Le sigue el Conicet, con un 64 por ciento de votos de confianza.
Por el contrario, la peor rankeada es la Justicia. El 86 por ciento de los encuestados le desconfía, lo que indica que para casi todo el mundo el Poder Judicial, por acción o por omisión, no está haciendo cumplir la ley. La actividad del Congreso también es objeto de la desconfianza del 82 por ciento de la opinión pública. Los partidos políticos también están desvalorizados, ya que generan más desconfianza (un 76 por ciento de los consultados votó esa opción) que confianza. Los periodistas y los medios también quedaron muy mal puntuados y son objeto de desconfianza.
La encuesta también inquirió sobre la confianza de la gente en la sostenibilidad de la política cambiaria del Gobierno, la que chocó con la opinión de la mayoría, más del 65% entre probable y muy probable. que considera cercana otra devaluación.
Otro aspecto llamativo en relación a las últimas decisiones adoptadas por el Gobierno es la reacción frente al decreto que limitó el acceso a la información pública. Casi el 60% lo consideró muy grave, a lo que se suma un 15,9% que lo califica de grave, lo que suma un total de rechazo por arriba del 75%.
Las preguntas fueron formuladas entre el 6 y el 9 de septiembre. «Decidimos profundizar sobre el estudio de la palabra presidencial e indagamos la opinión ciudadana desde dos ópticas, la credibilidad en las frases pronunciadas por Milei y la confianza en el presidente y las instituciones», explicaron los autores al presentar los resultados, para quienes hay un fenómeno llamativo en que la gente crea que muchas de las frases dichas por el presidente recientemente sean mentiras.
La confianza en los actores públicos del sistema político está por el piso, pero además, «la desconfianza inunda todos los rincones de la vida personal e institucional. El 56 por ciento desconfía de que Milei vaya a mejorar la vida del país. Pero también, al medir cuestiones relativas a la economía, como la dolarización o la posibilidad de una devaluación, la desconfianza vuelve a aparecer. Lo primero ya quedó descartado como una simple promesa de campaña, y lo segundo aparece hoy como una posibilidad cierta a pesar de los esfuerzos negadores del gobierno», dicen Zuban y Córdoba.
En resumen, «Argentina enfrenta nuevamente a uno de sus problemas crónicos: el desgaste de sus oficialismos ante la falta de resultados concretos. Desgaste que suele empezar a mostrar síntomas en la desaprobación de cuestiones puntuales y poco a poco se va extendiendo a otras áreas y hacia la imagen de la gestión en general».