Elecciones para el Parlamento Europeo. Números e ideas. Negocios en San Petersburgo. La OTAN, con timón fijo y dificultades crecientes. Sigue la transferencia: del salvataje financiero a la compra de armas. Una tontería, y un delito.
( Por Gabriel Fernández *)
EUROVOTOS. Mientras usted, lector, se adentra en estas líneas, las elecciones para la configuración del Parlamento Europeo se estarán desarrollando intensamente. Los ciudadanos de los 27 estados miembros de la Unión Europea (UE) están convocados a las urnas para escoger cuáles serán sus representantes en la próxima legislatura. Este año, el número de eurodiputados aumentará, desde los 705 que se registran en el presente hasta los 720 que habrá a partir del mes entrante y durante los próximos cuatro años. El incremento está directamente ligado al volumen de población. Quienes resulten electos este 9 de junio representarán políticamente en Bruselas a los 448 millones de habitantes que viven en los estados miembros de la Unión.
Estos comicios se concretan en un marco en verdad complejo. Los tironeos con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que ha disciplinado a la entidad política hasta niveles significativos, están a la orden del día. El impulso cuasi desesperado de las grandes corporaciones financieras para lograr que el continente en su conjunto invierta -¿o corresponde precisar “gaste”?- zonas formidables de los ingresos productivos en armamentos, ejércitos y pertrechos bélicos en general, ha llevado, junto a las sanciones sobre Rusia y, en cierta medida, sobre China, a consecuencias que oscilan entre el estancamiento y la caída de los Productos que evidencia cada nación. La guerra sobre Ucrania está resultando costosísima y carente de perspectivas razonables.
A ver: Confucio planteó no importa cuán lento vayas, mientras no pares. Este periodista considera que la traslación de riquezas del ámbito social y productivo en cada país, está relevando una movida similar establecida desde el año 2008 para salvar a los grandes bancos de su propio hundimiento. Es decir, Europa ya utilizó buena parte de sus recursos en un salvataje sin más fundamento que el interés específico de las corporaciones que controlan las finanzas y las armas. Como las grandes casas se estabilizaron en sentido relativo, pero el carcinoma que representa su modo de acumulación no permite un freno, el argumento para relanzar ese ducto dinerario es la guerra. O mejor, las guerras. O quizás, la Gran Guerra.
Vamos a lo puntual. El funcionamiento electoral europeo es así: la circunscripción es cada estado miembro, que escoge a un determinado número de diputados, diferente en cada caso, en función de su volumen de población. Para ejemplificar digamos que catalanes, vascos, madrileños, andaluces, valencianos, gallegos, castellanos, etc. están escogiendo la representación en la Eurocámara del Estado español. Así en cada país, según su propio diseño. Después, cada candidatura, los diversos partidos, se alinearán en la Eurocámara con sus afines ideológicos de los otros estados miembros: conservadores, socialdemócratas, liberales, verdes, izquierda, derecha o no adscriptos a ningún grupo conceptual.
PAÍSES Y CONCEPTOS. Cabe indagar cuántos diputados escoge cada estado miembro. El número de representantes que corresponden para la próxima legislatura se fijó en septiembre del 2023, de acuerdo con el volumen de población de cada país, basándose en el principio de “proporcionalidad decreciente”. Es decir, cada eurodiputado de un país grande representa a más personas que un eurodiputado de un país pequeño. El número mínimo de eurodiputados que se puede asignar por país es de 6 asientos, mientras que el máximo es de 96. Este año, el país con más representación volverá a ser Alemania, el estado miembro más poblado: tendrá 96, los mismos que tuvo en 2019. Después, Francia, que tendrá 81, dos más que en 2019. Tercero, Italia, con 76, igual que en los últimos comicios. Y en cuarta posición, España, con 61 diputados, dos más que los que tuvo en la última legislatura. La lista país por país es la siguiente:
- Alemania: 96
- Francia: 81
- Italia: 76
- España: 61
- Polonia: 53
- Rumania: 33
- Países Bajos: 31
- Bélgica: 22
- Grecia: 21
- República Checa: 21
- Suecia: 21
- Portugal: 21
- Hungría: 21
- Austria: 20
- Bulgaria: 17
- Dinamarca: 15
- Finlandia: 15
- Eslovaquia: 15
- Irlanda: 14
- Croacia: 12
- Lituania: 11
- Eslovenia: 9
- Letonia: 9
- Estonia: 7
- Chipre: 6
- Luxemburgo: 6
- Malta: 6
Resulta ostensible que orientarse por las denominaciones públicas que presenta cada formación puede generar equívocos. Por caso, la dualidad preferida por los medios occidentales -aunque en ocasiones reproducida por los críticos- entre izquierda y derecha poco indica. Esto es así debido a que el mencionado callejón elaborado por la OTAN sobre la UE involucra a las más diversas vertientes. Entonces, presuntos demócratas radicalizados agitan fuertes condenas a “los comunistas” chinos, ecologistas enfurruñados baten el parche contra naciones empobrecidas que carecen de poder contaminante, derechistas con aire rebelde la emprenden contra quienes pretenden salirse de la órbita atlantista. Y mucho más. A decir verdad, en cada nación es preciso detectar a quién responde y cómo actúa cada fuerza en concreto. Eso es lo que hacemos cotidianamente en estas Fuentes Seguras.
Ninguna banderola bien pensante debe ser aceptada a priori como progresiva, y ninguna transgresión altisonante merece una consideración rápida cual patriótica y anti norteamericana. La política europea ha sido trastrocada y delimitada por el Supra Poder mediante la desterritorialización de sus estados miembros. Esas instituciones son orientadas hacia la colaboración con las empresas antes señaladas; pero el peso del voto, de las calles, de los sindicatos, de los espacios periodísticos genuinos, contiene un potencial interesante que impide afirmar que la historia ha concluido. Estamos en medio de la tormenta; será interesante observar el panorama cuando amaine.
Por eso resulta pertinente aguardar la votación y, a partir de sus resultados, ahondar en el significado de los mismos en cada integrante de la Unión. Hasta ahora, los comicios parciales evidenciaron una tendencia anti atlantista de cierta relevancia, y los panoramas económicos internos en cada sociedad, un rechazo a las decisiones ultraliberales destinadas al ajuste; por tanto, a la transferencia del llano a la cúspide. La plasmación de estas objeciones en el Parlamento Europeo puede trabar el andar hegemónico regional diseñado por la OTAN; sin embargo, las presiones y las amenazas, de enorme virulencia, intentarán quebrar eventuales acuerdos contra la política general de rasgos abyectos que se ha impuesto hasta el presente.
Este horizonte aquí descripto no es transparente a la mirada de la opinión pública del Viejo Continente. La energía con que dirigentes y medios han catalogado a rusos, chinos, iraníes, emergentes en general, ha logrado retraer el espíritu crítico e instalar la sugerencia de no cooperar con dictadores, autócratas y fanáticos religiosos. No es imposible entenderlo desde el Sur de nuestro mundo: la intoxicación diseminada por la propaganda tradicional y por las redes sociales -bombas de racimo de aquella- conlleva a que cada opositor al sendero atlantista destine más vigor a mostrarse democrático y europeísta que a decir la verdad. La mayor parte de los objetores temen -tiemblan- ser acusados de populistas porque en esa caracterización visualizan sus tumbas políticas.
De tal modo, es labor ciclópea hablar de Política. En vez de adentrarse en el sentido profundo y comprender a quién responde tal formación y cuál es el sentido de sus acciones, quienes perciben que el andamiaje no funciona, piden disculpas por pensar así. Es el antiguo mecanismo macartista instituido en los Estados Unidos. Europa había zafado por buen tiempo de ese cepo narrativo, y sus corrientes populares sonreían ante los embates despolitizadores norteños. Ya no es así. La mera precisión periodística que distingue al terrorismo de Al Qaeda con una organización político militar como Hezbollah, es merecedora de censura, aislamiento, imputación. Todo es calificado como adoctrinamiento.
LENINGRADO. Por debajo, el sendero sigue en construcción. Una nueva edición del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, fue realizado en Rusia del 5 al 8 de junio. Este refugio para empresas productivas que se observan desplazadas del juego instaurado por el gran capital financiero, reafirmó el papel de las asociaciones multipolares como motor de un orden mundial diferente, con centros de poder alternativos y una arquitectura financiera internacional inmune a sanciones discrecionales. Vale recordar que hasta quienes afirman que todo está predestinado y nada cambiará el destino, son precavidos al cruzar una calle.
De hecho, el intenso programa del evento tuvo un fuerte énfasis en temas como la ampliación de los BRICS. Entre los invitados de honor en el foro estuvo el presidente de Bolivia, Luis Arce, quien confirmó la intención de su país de adherirse al bloque. Lo hizo al intervenir en la sesión plenaria del foro, donde se expresó también el presidente de la Federación de Rusia, Vladímir Putin. “Nos ratificamos en la justeza del mundo multipolar, en la conformación de nuevos bloques como los BRICS, al cual aspiramos pertenecer en el menor plazo posible”, manifestó Arce al afirmar que las economías del grupo “han quebrado la hegemonía de EEUU” y “son la esperanza de desarrollo, cooperación y complementariedad”.
Por su parte, el jefe de Estado ruso, además de constatar que los BRICS constituyen el 36% del Producto Interno Bruto mundial y casi la mitad de la población global, indicó que están avanzando en la creación de “un sistema de pagos independiente que no esté sujeto a presiones políticas, abusos y sanciones externas”. “Los BRICS tienen un gran potencial para el ingreso de nuevos miembros y, por supuesto, nosotros saludamos y apoyamos el deseo de los socios interesados en diferentes continentes de desarrollar contactos”, subrayó Putin.
Entre los países resueltos a incorporarse a los BRICS también se encuentra Venezuela, representada en el foro por una delegación encabezada por el vicepresidente Sectorial de Economía y ministro de Industrias y Producción Nacional, José Félix Rivas Alvarado. “Tenemos la esperanza que sea lo más rápido posible, porque Venezuela, que está en la confrontación contra las fuerzas que quieren disolver los Estados nacionales, está del lado de la construcción de ese mundo multipolar y de la nueva arquitectura económica y financiera, y ahí los BRICS son importantes”, dijo el funcionario. Como se percibe, avanza la claridad acerca de lo que sucede en el orden global.
En línea, la directora del Comité Nacional para la Colaboración Económica con los Países de América Latina, Tatiana Mashkova, directora ejecutiva del Consejo Empresarial Rusia-Venezuela, constató que, gracias a la implementación en la nación caribeña del sistema ruso de pagos internacionales MIR, se pudieron preservar las transacciones financieras entre ambos países, que realizan su comercio en monedas nacionales. Es que el ser humano suele plantearse los problemas que puede resolver, cabe añadir.
AMERICANOS LÚCIDOS. Avanzar hacia los BRICS también fue uno los objetivos clave de la participación de Nicaragua, cuya delegación en el foro la encabezó el asesor del presidente para Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional, Laureano Ortega, enviado especial del Gobierno para las relaciones con Rusia. El delegado puso de relieve que los BRICS son una herramienta fundamental para hacer frente “a lo que ha sido el dominio hegemónico histórico de los Estados Unidos y sus aliados europeos, que han sometido al subdesarrollo a los países del sur especialmente”. (Puede interesar: Laureano Facundo Ortega Murillo, de 42 años, es el sexto hijo del matrimonio de Daniel Ortega y Rosario Murillo)
Por su parte, el presidente de la Comisión Económica y Financiera en la Asamblea Nacional nicaragüense, Wálmaro Gutiérrez (¿alguien conocía ese nombre?), respaldó la creación de alternativas al sistema occidental de transacciones financieras SWIFT, que “lo único que ha logrado es garantizar el sometimiento de un Estado sobre otro”. En este contexto, citó el caso del sistema ruso de pagos internacionales MIR. “Brinda la posibilidad de negociar en nuestras propias monedas, en una canasta de divisas que nos permita fortalecer el intercambio comercial, en este caso con la Federación de Rusia”, apuntó.
Un planteo que debería reverberar al interior argentino fue el desplegado por Wilmar Castro Soteldo (si, como el talentoso jugador bajito), ministro del Poder Popular de Producción Agrícola y Tierras de Venezuela, quien destacó en entrevista con Sputnik lo que su país puede ofrecer: la frontera agrícola “más grande del continente sudamericano y caribeño”. “Esa superficie, más de 15 millones de hectáreas estarían disponibles ante los pueblos de los BRICS para producir sus alimentos, no solo para los países de origen, sino para coadyuvar a los países de América latina y el Caribe y otros países del mundo que tienen dificultades con suelo, con agua, con nevadas, con ciclones, con fenómenos meteorológicos adversos para el desarrollo de la agricultura, poder llevar a esos países los alimentos producidos en Venezuela y con inversión y con cooperación de todos los países BRICS”, relató el ministro durante la XXVII edición del cónclave.
Hay más. En el foro también estuvo el secretario permanente del Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), Walter Clarems Endara Vera, quien resaltó “Entre 13 y 15 países de la región ya tienen comercio con Rusia. Es un comercio creciente, ha sido sostenible en la época de crisis. Y eso está demostrando que se puede hacer comercio, se puede tener relaciones de cooperación, pese a estas sanciones unilaterales, que, por supuesto, son injustas y que, además, agreden a la propia integración de la región de Latinoamérica y el Caribe”, declaró al indicar que el objetivo ahora es mejorar la eficiencia de los mecanismos que permiten blindarse ante las sanciones occidentales.
Resulta de interés señalar que ese Sistema, creado el 17 de octubre de 1975 (piense, lector, o mejor, evoque), está integrado por 25 países de América latina y el Caribe, entre los cuales se cuenta la Argentina. Es probable que las autoridades actuales ni siquiera conozcan su existencia. Pero sí saben del mismo naciones como México y Brasil, que lo vienen usufructuando para coordinar los intereses regionales. El SELA posee un vínculo estratégico con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). La mayor parte de sus miembros estiman que estas herramientas les pueden servir para entablar nexos con el bloque euroasiático; no se les ocurre insultar a posibles inversores.
La cumbre de los BRICS que se celebrará el próximo mes de octubre en Kazán será crucial para trazar la hoja de ruta hacia la multipolaridad. El Comité Organizador del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, acaba de anunciar que en ella participarán 30 delegaciones de distintos puntos del planeta. Los tártaros están emocionados: Kazán es la capital de la República de Tartaristán, dentro de la Federación. La ciudad se encuentra a orillas del Volga, el río más extenso y caudaloso de Europa, cuyas aguas consume Moscú. Esa arteria cuenta con una enorme estatua de la Madre Volga, en la central hidroeléctrica de Rybinsk, quien extiende su mano hacia el embalse y tiene grabado en su base el lema de Lenin de 1920: “El comunismo es el poder soviético más la electrificación de todo el país”.
LA OTAN, RÍGIDA. Considerar estas informaciones permite entender buena parte del proceso internacional en marcha. Con esa intención, vale completar el cuadro mediante el anverso. Mientras todo esto sucede, se deshilacha la reunión pomposamente titulada Cumbre por la Paz sobre Ucrania que se celebrará en Suiza los días 15 y 16 de junio: el presidente norteamericano Joseph Biden, quien emergía como el más interesado en su concreción, anunció que no participará. Pocos días antes, la reunión informal de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN delineó aspectos del encuentro venidero del atlantismo. Su pretensión es la de establecer “una estructura permanente” para coordinar la ayuda a Kiev a largo plazo, “independientemente de los cambios políticos que se produzcan en los Estados miembros”.
Esa última frase es para el asombro, tomando en cuenta que se están llevando adelante las mencionadas elecciones para el Parlamento Europeo. Da cuenta, sin cortapisas, de la incidencia de las corporaciones financieras y armamentísticas en las decisiones de los gobiernos regentes en la OTAN. Como si tal definición no bastara, cabe prestar atención a las consideraciones del jefe del Comité Militar de la coalición, Rob Bauer, originario del ahora llamado Países Bajos: anticipó al The Washington Post que en la reunión de julio “Está claro que no se tomará una decisión sobre la adhesión de Ucrania a la OTAN”.
“Si permitiéramos ahora la entrada de Ucrania en la alianza, teniendo en cuenta el Artículo 5, la OTAN estaría en guerra con Rusia. Así que eso no es algo que nos parezca sensato y, por tanto, no va a ocurrir”. En este sentido, dijo que la primera cuestión estará relacionada con la “misión” destinada a que “Ucrania se acerque cada vez más a la OTAN”. Según Bauer, el acercamiento de Kiev a la Alianza incluiría coordinación de adiestramiento del Ejército ucraniano, coordinación de la ayuda militar entre los miembros de la OTAN, suministro de ayuda militar a través de centros logísticos y discusiones sobre el futuro de las Fuerzas Armadas de Ucrania después del conflicto.
“En segundo lugar, se va a debatir acerca de un flujo financiero más sólido y continuo para Ucrania, y no una especie de debate mensual”, continuó. En este contexto, subrayó que la Alianza busca asegurar que “Ucrania sepa que hay un presupuesto determinado al año, entonces eso les ayuda mucho a organizarse durante la guerra y después de la guerra”.
El alto oficial indicó que la tercera cuestión clave en relación con Ucrania es la creación de un nuevo centro común de formación analítica en Polonia para “aprender lecciones correctas” del conflicto en Eurasia. Si leemos entrelíneas podemos enfocar: Ucrania, primarizada en manos de Blackrock controlando sus tierras fértiles, y convertida en cuartel de la OTAN, a metros de Rusia.
HISTORIA Y ANTI HISTORIA. Así van los asuntos humanos, lector. Preste atención, en el repaso, a la evolución de salvataje bancario a adquisición compulsiva de armamentos para entender la clave de la desterritorialización occidental. Y fíjese como replican, en modo capitalista ordenado por los estados, los espacios multipolares. Pese a lo evidente del sendero abierto, los ciudadanos de gran parte del planeta ni sospechan las modificaciones en la vida cotidiana que pueden forjar los avances científico técnicos ya existentes. Es que el bloque anglosajón que coordina la OTAN es anti histórico; tracciona en sentido inverso a las necesidades y a las posibilidades de los ocho mil millones de seres que deambulan sobre el globo.
Los intereses materiales son demasiado potentes como para admitir esa energía involutiva.
Quizás la gran inversión a futuro sea derrumbar los preceptos liberales. Se dice que el Estado dilapida cuando invierte en educación, salud, ciencia, deporte, energía. ¡Pero si para eso se formaron los estados! Su función es absorber los tributos de la población y orientarlos según las necesidades sociales. Precisamente para eso se crearon. El déficit cero es más que un imposible; es una tontería, y un delito.
- Area Periodística Radio Gráfica / Director La Señal Medios / Sindical Federal
Pinturas Jan van Eyck
