Edición n° 2804 . 26/07/2024

EL AMIGO AMERICANO DEL TIRANO

Las empresas públicas quedan en las garras de fondos de inversión extranjeros

En su primera presentación por cadena nacional, en el que explicó los alcances del decretazo que desregula la economía argentina y facilita la venta del patrimonio argentino, el presidente Milei se abrazó al magnate Elon Musk. 

( Por Alfredo Moreno *) El Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU) que establece el programa económico del Gobierno, entre los que se registra en el punto 28la desregulación de los servicios de internet satelital. En su presentación Milei dijo«para permitir la competencia de empresas extranjeras» haciendo explicita referencia a «Starlink«, la empresa de satélites de baja altura de Musk.

Starlink es la empresa global de servicios de internet satelital que fundó en 2015 Elon Musk, como parte de su compañía espacial SpaceX. El hombre más rico del planeta, con un afortunado personal que según los forbes llega a 240.500 millones de dólares, fue muy elogioso con el libertario de que ganara el balotaje.

Fue la única empresa privadanombradapor el presidente la noche donde también se escucharon “las cacerolas” de las personas que repudiaban el DNU anunciado.

Desregular el sector satelital, implica poner fin al Acuerdos de Reciprocidad mediante el cual Argentina interviene en la gestión de acuerdos nacionales para obtener un tratamiento recíproco de los sistemas satelitales de la República Argentina.

En virtud de los compromisos asumidos por el Gobierno Argentino en la Organización Mundial del Comercio (OMC), ratificados por Ley Nº 25.000, la Argentina liberalizó los servicios de telecomunicaciones a partir del 8 de noviembre de 2000[i].

La única excepción prevista al esquema de libre competencia de dicho compromiso es en la provisión de facilidades satelitales de los satélites artificiales geoestacionarios del Servicio Fijo por Satélite. Esta excepción tiene su fundamento en las obligaciones asumidas por el Gobierno Argentino en el Contrato de Adjudicación fruto del Concurso Público Nacional e Internacional para la provisión, puesta en servicio y operación de un sistema satelital para la República Argentina.

Así es que, para que un satélite extranjero pueda proveer facilidades satelitales en el territorio de la República Argentina, la Administración a la que pertenece tal satélite debe otorgarles a los sistemas satelitales nacionales tratamiento recíproco.

SpaceX lanzó más de 4.000 satélites y proporciona internet de alta velocidad a más de un millón de lugares en todo el mundo, la mayoría de los que tienen hijos y los hogares, según información compartida por la compañía fundada por Musk. Semana atrás, la empresa aeroespacial lanzó con éxito un nuevo cohete Falcon 9 con 22 satélites más de más del complejo de lanzamiento espacial de Vandenberg, en California.

Con la entrada en la red de Guyana, Surinam, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Argentina, todos los países de Suramérica, Venezuela, contar con lo servicio de Starlink a final del próximo año.

MODIFICIACIÓN DE LA LEY ARGENTINA DIGITAL POR DNU

El decreto de Milei incluye en su Capítulo II modificaciones a la ley Argentina Digital (Ley No 27.078) indica que la provisión de facilidades de los sistemas satelitales comunicaciones se libre.

La modificación de la ley establece que la provisión de facilidades de los sistemas satelitales de comunicaciones sea libre y que se «requerirá a los titulares de los sistemas el registro para ordenar su operación, al solo efecto de coordinar el uso de las frecuencias radioeléctricas y interferencias evitadas sobre otros sistemas conformes a la reglamentación que la Autoridad de Aplicación. La prestación de cualquier servicio de TIC por este satélite sometida al régimen general de prestación de Servicios de TIC establecido en la ley.

Además, establece que la radiodifusión por suscripción es toda forma de comunicación primordialmente unidireccional destinada a la transmisión de señales para ser recibidas por público determinable, mediante la utilización del espectro recto o vinculo físico o satelital, indistintamente.

En marzo de 2022, la empresa de Musk se registró en el país como «Starlink Argentina S.R.L.». Sin embargo, continuaba sin prestar sus servicios. Musk ya había expresado en los últimos meses su inclinación al candidato de la ultraderecha. Cuando se conocieron los resultados del balotaje 2023 y Milei fue elegido presidente, el empresario tuiteó: “Argentina se prepara para la prosperidad”.

El proyecto de Musk, fundador de SpaceX, busca proporcionar conectividad global a través de una red de satélites en órbita baja. La empresa del multimillonario dueño de la X (exTwitter) provee internet con satélites de baja altura; mientras la mayoría de los servicios de internet por satélite provienen de equipos que orbitan a unos 35 mil km de la Tierra, los equipos de la empresa de Elon Musk están a 600 kilómetros.

Esa distancia reduce el tiempo que lleva a los datos hacer el recorrido de ida y vuelta entre el usuario y el satélite, que, para enviar su señal, necesitan la propagación de ondas electromagnéticas. Además, el servicio tiene como ventaja que evita la construcción de infraestructura como torres o cableado.

Los clientes/usuarios de Starlink necesitarán un kit configurado para una zona geográfica determinada, que recibirá las señales a través de la antena del router incluido en el paquete.Los equipos para acceder al servicio de internet satelital tienen un costo único de 500 dólares por el kit de instalación, que incluye un trípode, un enrutador Wi-Fi y una terminal para conectarse a los satélites. La tarifa mensual es de 99 dólares.

El objetivo es debilitar ARSAT

La empresa pública de telecomunicaciones con balances positivos y ganancias en aumento, tiene su principal renglón de facturación local y sobre todo internacional en los servicios satelitales producido scon los ARSAT 1 y 2. Un plan de crecimiento tecnológico y comercial con el ARSAT- SG1 cuya puesta en órbita se desplazo a 2025 le permite e la empresa de bandera seguir siendo un jugador en el selecto equipo de países con desarrollo y puesta en servicios satelitales a nivel mundial.

Desregular el sector satelital argentino tiene como único objetivo debilitar financiera y económicamente la empresa pública, sacarle capacidad de competencia y empobrecerla patrimonialmente. Es decir,bajar su valor como empresa de telecomunicaciones.

ARSAT pudo sobrevivir al período 2016-2019 solamente por la facturación satelital producida por los servicios de los ARSAT1 y 2. El gobierno de Macri discontinúo el Plan Satelital Argentino,dejando al país sin la constelación de los ARSAT 3 y 4 que deberíamos tener orbitados a la fecha.

Con los hechos del presidente Milei tenemos menos Patria y menos Soberanía. Solo queda Argentina SA.

Algo de Tecno

Los modelos Sputnik de la URSS, se orbitaron en 1957. Desde entonces y hasta finales del siglo XX las grandes potencias mundiales, lanzaron cientos de satélites, compitiendo en una carrera espacial por explorar el espacio con proyectos cada vez más grandes y complejos.

El primer Sputnik pesaba 80 kilos y el segundo, más de 500. Al día de hoy, la Estación Espacial Internacional (ISS) tiene una masa de más de 420.000 kilos.

Durante mucho tiempo, la tecnología implantada en el espacio, cada vez es más grande y sofisticada, sólo estaba al alcance de las agencias espaciales de los países más desarrollados de la tierra o al servicio de las grandes empresas. Argentina con sus ARSAT 1 y 2 conforma este selecto grupo.

 La filosofía del New Space es crear satélites de una manera más rápida y barata, gracias a los bajos costos y a la miniaturización cada vez mayor de los componentes electrónicos.

Stralink conforma el espacio conceptual y comercial conocido como New Spaces, el nuevo espacio para los negocios satelitales. Este concepto implica una tecnología conocida como Nanosatélites.

¿Cuál es el tiempo de desarrollo de un nanosatélite?

Un satélite mediano o grande geoestacionario precisa de un periodo de entre 5 y 10 años desde que se detecta la necesidad u oportunidad hasta que se sitúa en parámetros normales en la órbita adecuada. 

La tecnología de telecomunicaciones propicia cambios y actualizaciones constantes y el satélite convencional acaba operando con tecnología de hace 10 años. Un satélite grande no puede ser actualizado continuamente, por lo que cuando se detecta una oportunidad tecnológica o de mercado, no puede modificarse.

Sin embargo, en el caso de los nanosatélites, desde que se identifica la necesidad hasta que el nanosatélite está en órbita atendiéndola, pueden pasar menos de 12 meses.

Las constelaciones de nanosatélites además de ofrecer redundancia y robustez constituyen un sistema para el que los conceptos de obsolescencia o vida útil dejan de tener sentido. Por su propia naturaleza, los nanosatélites de una constelación se van renovando periódicamente con lo que el sistema es en todo momento incorpora la innovación tecnológica. Esta renovación constante permite al propietario de la constelación ofrecer en todo momento el mejor servicio tecnológicamente posible.

Datos clave sobre nanosatélites

Órbita polar

Los satélites orbitan alrededor de la Tierra siguiendo trayectorias circulares o elípticas que se consiguen a través de un equilibrio entre la fuerza de atracción de la gravedad y la de escape marcada en su lanzamiento. Al no existir aire, no existe rozamiento que altere la ecuación y pueden permanecer en órbita de manera casi indefinida. Normalmente los nanosatélites describen una órbita polar, es decir, corren en el sentido de los meridianos terrestres. Cuando finaliza el periodo de operación de un nanosatélite, este vuelve a la atmósfera y se desintegra.

Baja altura

Como norma general, los nanosatélites se lanzan en órbitas bajas circulares (400 – 650 Km de altura) y viajan a unos 8 km/s. A esa altura y velocidad, tardan en dar una vuelta a la Tierra unos 90 minutos para completar un total de entre 14 a 16 órbitas por día. Este tipo de órbita baja es ideal para los nanosatélites. Al orbitar más cerca de la Tierra, no solo tienen condiciones óptimas para observación terrestre o comunicaciones, sino que están más protegidos de la radiación solar y cósmica.

Los nanosatélites se agrupan en constelaciones (grupos) que aportan respaldo, redundancia y granularidad a los servicios que ofrecen. Cada satélite en una constelación es renovado cada 2-4 años, asegurando que el operador siempre cuenta con un servicio optimizado, de bajo riesgo y con actualizaciones tecnológicas constantes. Por esta razón, las constelaciones de nanosatélites constituyen un sistema para el que los conceptos de obsolescencia o vida útil dejan de tener sentido.

En la actualidad, los satélites ya no son una competición entre superpotencias, sino una oportunidad de negocio basada en el abaratamiento de la tecnología.

Durante el año 2022, se lanzaron más de 330 satélites y se prevé una tendencia al alza a corto y medio plazo. Los operadores emergentes, la entrada de financiación y las nuevas aplicaciones a disposición de empresas, organismos públicos y usuarios explican el crecimiento continuo que ha tenido el sector en los últimos años.

El New Space no solo está propiciando la presencia de más nanosatélites en órbita, sino que favorece su uso con fines comerciales. Mientras que entre 2013 y 2017 casi la mitad de los nanosatélites lanzados cumplía misiones militares y civiles, y la otra mitad tenía funciones comerciales, el pronóstico para los próximos años es muy diferente. Se espera que para 2023 hasta el 66% de las operaciones de nanosatélites en órbita tengan un objetivo de negocios del espacio.

Los satélites de órbita terrestre baja (LEO) se han utilizado cada vez más con fines de vigilancia en los últimos años. Si bien ofrecen una serie de ventajas, también hay algunos inconvenientes potenciales a considerar.

Una de las principales ventajas de los satélites LEO es su capacidad para proporcionar una cobertura casi global. Al orbitar la Tierra a una altitud mucho más baja que los satélites tradicionales, pueden proporcionar una cobertura continua de grandes áreas del planeta. Esto los hace ideales para monitorear eventos en lugares remotos o de difícil acceso.

Los satélites LEO también ofrecen imágenes de mayor resolución que los satélites tradicionales. Esto permite un análisis más detallado de los datos recopilados. Además, los satélites LEO pueden recopilar datos más rápidamente que los satélites tradicionales, lo que puede ser beneficioso para el monitoreo en tiempo real.

Sin embargo, existen algunos inconvenientes potenciales en el uso de satélites LEO para la vigilancia. Uno de los principales problemas es el costo. Los satélites LEO son mucho más caros de lanzar y mantener que los satélites tradicionales, lo que puede hacerlos prohibitivamente caros para algunas aplicaciones.

Además, los satélites LEO tienen una vida útil mucho más corta que los satélites tradicionales. Esto significa que deben reemplazarse con más frecuencia, lo que puede resultar costoso. Finalmente, la baja altitud de los satélites LEO puede hacerlos vulnerables a la interferencia de otros satélites y a la basura en el espacio.

Como en 2006 cuando el presidente Néstor Kirchner fundo ARSAT y en el 2014 y 2015 se orbitaron los ARSAT 1 y 2 produciendo capacidades nacional solamente conocidas en países desarrollados, Argentina en el 2022 vuelve a mostrar que es posible; el satélite marplatense “MDQube-SAT1” fue enviado al espacio desde la NASA y el evento fue  transmitido en vivo a través de Youtube, al tiempo que en la sede del Banco Provincia de la peatonal San Martín se montará una pantalla de LED para ver este hecho histórico. Se trato del primer nanosatélite (satélite pequeño) realizado en el país, y en Latinoamérica, el cual será lanzado desde la Unidad Falcon 9 -Space X, en Cabo Cañaveral, Florida (EEUU).

“San Martín al Espacio” es un proyecto que nació en las aulas de la Escuela Técnica N° 5, ubicada en Juan B. Justo 4287. En aquel establecimiento educativo, y en el inicio del ciclo lectivo 2019. Así fue como nació la compañía Innova Space que, con el apoyo de Neutrón, la aceleradora del marplatense Grupo Núcleo, y el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, pudo concretar este proyecto.

El picosatélite tiene una dimensión de 10 centímetros por 5 centímetros, por otros 5 y un peso de 500 gramos. Su órbita polar a unos 400-500 kilómetros de altura.Con el objetivo de brindar cobertura de comunicaciones a puntos que actualmente no tienen conectividad, el proyecto apunta a brindar soluciones y mejorar la competitividad a los sectores de la agricultura, la minería, el petróleo y el gas, entre otras.

Que no se corte…. Aunque como dice el tango yo se que ahora vendrán caras extrañas con su limosna de alivio a mi tormento……

Alfredo Moreno

Ing. TIC en ARSAT, Profesor TIC en UNM, Integrante de la red PLACTS


[i]https://www.argentina.gob.ar/jefatura/innovacion-publica/telecomunicaciones-y-conectividad/asuntos-satelitales/acuerdos-de