Edición n° 2684 . 28/03/2024

CON PAKAPAKA NO ALCANZA

Alejandro Malowicki/Director de cine-Docente

Cuando uno es chico, es como que vive drogado.

Todo es más grande, todo es una alucinación.

Y de repente… paaaf. A la mayoría de la gente,

se le va eso. Se le va la ilusión, se le va la 

autoestima. Charlie García

 Revista “Mavirock” Nro. 27. 2013

El cine dirigido a las audiencias infantiles continúa siendo el patito feo de la producción cinematográfica nacional. Un cine qué debería estar muy presente no solo está ausente sino que esta ausencia conlleva la responsabilidad tanto del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Ministerio de Cultura, los sindicatos de Cine y televisión, las Asociaciones de actores y actrices, las asociaciones de directores y productores de Cine, la Academia de Cine y por supuesto como ya lo he manifestado en muchas notas por este mismo medio y en otros, por la casi totalidad de las escuelas de cine y televisión de todo el país al no incluir en los planes de estudio una materia que enseñe la creación de guiones para películas dirigidas a las infancias.

Entre las políticas instrumentadas por el INCAA están aquellas que apoyan y subsidian al cine de largometraje para público adulto y también al cine documental pero no existe una política destinada alapoyo de producciones para el público infantil, y ésta es una de las causas más importantes que imposibilitan el interés de los productores, productoras, directores y directoras para encarar una película para éstos públicos. 

Como en todas las áreas de la economía la producción necesita de la educación para crecer fortalecida y también del apoyo estatal que intervenga no sólo a través de facilidades financieras sino con políticas de promoción y de difusión y con legislaciones que la protejan al momento de ingresar al mercado nacional.

La única presencia de producción nacional importante en los medios audiovisuales es la señal educativa Pakapaka en la televisión y la mencionó y la destaco porque ella es el resultado del compromiso con las infancias del Estado Nacional. Pakapaka fue creada por el Ministerio de Educación hace 12 años y por supuesto se mantiene gracias al financiamiento estatal. Está señal es la demostración de qué cuando el Estado decide participar activamente en los medios audiovisuales a favor de nuestras infancias  lo hace y lo hace muy bien. Pero con Pakapaka no alcanza. Es imprescindible que el Estado instrumente una política similar para generar películas argentinas dirigidas a todas nuestras infancias. Por supuesto que no estoy diciendo qué es necesario financiar en su totalidad a las producciones infantiles lo que quiero decir es que es imprescindible generar las ayudas necesarias para incentivar su producción y en esa incentivación atender a la provisión de financiamiento y promoción para todas las películas dirigidas a las niñas y a los niños.

El cine dirigido a las infancias no puede abandonar su razón de ser o sea la existencia de les niñes. Y carece de sentido si no incorpora en sus obras la cualidad que los identifica y los hermana transversalmente cualquiera sea su nacionalidad, idioma y color y que tanto los hace sufrir: ser contestatarios. Un adjetivo que los define como inconformistas, críticos, rebeldes, impugnadores, descontentos.

Hoy como antes de la pandemia la desigualdad se muestra con más ferocidad y desparpajo también en el dominio cultural absoluto de los espacios audiovisuales por parte de las producciones infantiles norteamericanas en la cuasi totalidad de las pantallas y pantallitas de nuestro espectro audiovisual. Pero a su vez es insuficiente esgrimir como causa principal de la minusválida presencia de producciones nacionales infantiles, al dominio de nuestro mercado por parte de las corporaciones norteamericanas.Pero si creemos imprescindible que nuestras infancias ocupen sus momentos lúdicos gozando de películas nacionales es imprescindible primero “crearlas”.

Ahora nuestras infancias se enfrentan a una realidad habitada por las multipantallas, el móvil, Internet, las plataformas, los podcast y las redes sociales y en todos estos medios audiovisuales ―hoy peor que ayer― la batalla cultural nos muestra alarmantes signos de que la estamos perdiendo y las infancias (como siempre lo han sido a lo largo de la historia) serán las que más sufran.

PROPUESTA:Una política que responda a los intereses de les niñes y del cine debería incluir la concreción de diferentes iniciativas. Acerco algunas propuestas que podrían ser encaradas por el INCAA en conjunto con otras instituciones públicas para fomentar la producción del cine dirigido a las audiencias infantiles.

  • Concurso de guiones de largometrajes  de acción viva y dibujos animados “INFANCIAS”. Inspirado en el concurso “Gleyzer” tuvo la 1era.edición en el 2009, la 2da. en el 2011 y luego fue abandonado a pesar de las muy buenas respuestas a las convocatorias.
  • Concurso Federal de guiones para cortometrajes de acción viva y animada. Premio: financiamiento total de la/las obras premiadas.
  • Concurso Federal de guiones de cortometrajes de acción viva y de animación de adaptaciones de obras literarias de escritores argentinos. Los proyectos elegidos deberían ser financiados integralmente por el INCAA, la Televisión Pública, el Ministerio de Educación, el Ministerio de Ciencia y Técnica y el Ministerio de Cultura.
  • Promoción Federal del cine para las infancias a través de seminarios de guión y de Producción dictados por profesionales con experiencia en el género.
  • ENERC: Cursosy Seminarios de extensiónen todas las provincias del país de guión y producción de cortos y largometrajes para las infancias en todas las provincias del país dictados por profesionales del cine con experiencia en el género.

Abrir puertas y ventanas es lo

que significa el cine para las infancias