( Por Karina Alice * / #motorcumple6Soberanías) El aumento de la temperatura, los incendios forestales, las inundaciones, la sequía, el clima extremo y la extinción de especies son consecuencia de la devastación ambiental.La crisis climática afecta en mayor proporción a la población de bajos recursos, el actual sistema productivo impacta en los ecosistemas generando un desequilibrio que altera la calidad de vida de millones de personas.
Los problemas ambientales en nuestro país son a causa de la deforestación, la megaminería, el fracking para la extracción de combustibles fósiles, la agroganadería extensiva, el monocultivo, el uso de agrotóxicos, todos ellos generan un impacto devastador en los ecosistemas.
La preservación de la biodiversidad, la transición hacia el Desarrollo Sostenible y las energías verdes, la incorporación de nuevas tecnologías, la educación ambiental, todo forma parte de un cambio que hará frente a la crisis alimentaria, energética y ambiental, poniendo a resguardo la salud humana y del medioambiente.
Los incendios forestales no cesan incluso en pandemia, 2020 fue el año con mayor cantidad de hectáreas afectadas por el fuego, la zona del Delta del Paraná en las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe fueron las más castigadas, provocando un grave daño al ecosistema y la biodiversidad.
La deforestación generó la pérdida de más de la mitad de los bosques nativos, las provincias de Chaco, Formosa, Salta y Santiago del Estero son las más afectadas, Argentina se encuentra entre los diez países con mayor deforestación en el mundo. El avance de la frontera agroganadera, el monocultivo y la ganadería extensiva son las actividades que llevan adelante la tala indiscriminada, las consecuencias son inundaciones, pérdida de suelo y biodiversidad.
La megaminería es una actividad contaminante que produce daños ambientales irreversibles, utiliza grandes cantidades de agua que provocan problemas socio-ambientales, en el norte se encuentra el triángulo del litio, un mineral clave en la transición energética y la electromovilidad, nuestro país es el cuarto productor mundial, se prevé que su demanda se triplique para 2025.
En esta transición clave para Argentina es necesario implementar un marco legislativo, innovación tecnológica y valor agregado.
Asimismo fomentar el desarrollo sostenible para promover el crecimiento socio-económico, el modelo productivo líneal dio inicio a la fabricación de grandes volúmenes a nivel industrial, como así también al uso de recursos naturales y combustibles fósiles de manera disruptiva.
El resultado, millones de toneladas de residuos en basurales a cielo abierto sin un correcto tratamiento, contaminando el aire, el suelo y las reservas de agua subterránea.
Los nuevos desafíos que debemos enfrentar y la importancia de poner en agenda temas claves para lograr una economía sustentable, políticas ambientales, dar valor agregado a los recursos naturales, mayor presupuesto para el cuidado y preservación de Parques Nacionales y Bosques nativos, son indispensables para alcanzar la Soberanía Ambiental, las y los argentinos tenemos derecho a vivir en un ambiente sano, los gobernantes evitan tomar decisiones para prevenir las graves consecuencias de la devastación ambiental, alertados por científicos por comunidades autoconvocadas y por los jóvenes que tienen mayor sensibilidad y preocupación por el medioambiente.
(*) Periodista, Especializada en Medio ambiente / Trabaja en radio y en el Portal Lomas.