Fernández informó que el objetivo central de la nueva limitación a las importaciones de las grandes empresas es «tratar de acumular reservas». El jefe de Estado también agregó que su objetivo es corregir las cuentas públicas, pero sin que el ajuste «lo haga la gente».
( Por Leandro Renou) A pocos minutos de subirse al avión que lo depositará de regreso a Buenos Aires, tras la participación en la cumbre del G7, el presidente Alberto Fernández dialogó con los cronistas que acompañaron la comitiva oficial. En ese sentido, Página/12 le consultó por las medidas que dispuso el Banco Central este lunes, que limitan el sistema de financiación de las importaciones solicitadas por las grandes empresas. “Son medidas que ya veníamos pensando de antes, pero esperamos que el directorio del Fondo aprobara el primer trimestre para ejecutarlas”, dijo Fernández, al añadir que el objetivo central de la nueva resolución del BCRA “es tratar de recuperar reservas”.
«También busca poner en orden las cuentas públicas porque nosotros no creemos que se pueda seguir viviendo eternamente con déficit fiscal», añadió. Eso sí, marcó el presidente, la corrección de los números fiscales deben corregirse «paulativamente y no salvajemente», contraria a la estrategia de shock que promocionan los economistas más alineados con el macrismo. «Hay que hacerlo sin ajuste, no lo tiene que hacer la gente. La economía tiene que mejorar pero el Estado tiene que hacer su parte. Ese es el sentido de las medidas que se tomaron hoy», completó.
Las medidas del Banco Central
- Las pymes quedan exceptuadas de las exigencias vigentes de financiar sus importaciones por un incremento de 15 por ciento respecto al año anterior, con un límite de hasta 1 millón de dólares.
- En el nuevo esquema de pagos, las SIMI (Sistema de Monitoreo de Importaciones) categoría A mantendrán el acceso al mercado de cambios por el equivalente al promedio mensual de importaciones de 2021 más 5 por ciento o de 2020 más 70 por ciento.
- Las SIMI categoría B, correspondientes a las licencias no automáticas, podrán acceder al mercado a partir de 180 días del despacho a plaza.
- Ampliar las posiciones arancelarias de bienes equivalentes a los producidos en el país que tendrán acceso al mercado a partir de 180 días y la de bienes suntuarios que podrán acceder a partir de los 360 días.
- Las importaciones de servicios se equiparan en el tratamiento a la de bienes permitiendo el acceso al mercado por el mismo monto que en 2021 y en caso de superar el importe el saldo a 180 días.
- Para las importaciones de bienes de capital se estableció una regla que permite pagar 80 por ciento en puerto de origen y 20 con la nacionalización.
- Se facilitará la prefinanciación de exportaciones lo cual acelerará el ingreso de divisas especialmente del complejo cerealero, pasando la obligación de liquidar las divisas que se ingresen de 5 a 15 días, y la financiación a largo plazo para precancelar deudas locales en moneda extranjera, indicaron desde el Banco Central.