Estados Unidos registró un nuevo récord de inflación en febrero impulsada en particular por el aumento de los precios de la gasolina y la escases de petróleo en ese país, como consecuencia de la guerra que Washington y la OTAN impulsaron en Ucrania.
Según los índices de la administración de Joe Biden, en los últimos doce meses a febrero la inflación fue de 7,9 por ciento, la más alta desde enero de 1982, según la Oficina de Estadísticas Laborales.
La crisis del petróleo
Los precios de la gasolina explican casi un tercio de esta aceleración, con un aumento de 6,6 por ciento con respecto a enero último. También refleja el efecto en los precios de las materias primas.
Los precios de la energía (que incluyen gasolina, crudo, electricidad y gas natural) se dispararon en febrero un 25,6 por ciento, liderados por el precio del crudo, con un aumento del 43,6 interanual, mientras que el gas subió un 23,8.
La guerra en Europa del Este impulsa esta situación. Rusia es uno de los mayores exportadores de petróleo y gas del mundo y la invasión a Ucrania desestabilizó estos mercados en todo el planeta.
Alimentos y materias primas
Según los especialistas, si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, que son los más volátiles, la inflación subyacente en febrero fue del 0,5 por ciento, con una tasa interanual del 6,4.
Los precios de los alimentos, por su parte, subieron un 7,9 por ciento, especialmente los relativos a compras en el supermercado, que aumentaron un 8,6 , mientras que los de la comida en restaurantes subieron un 6,8.
Con respecto a enero, el aumento de febrero fue de 0,8 por ciento, según el índice de precios al consumidor (IPC) publicado el jueves por el Departamento de Trabajo. En cuanto a la subida mensual, los precios de consumo subieron en febrero 8 décimas con respecto a los de enero, según esta estadística.
El martes y el miércoles de la próxima semana se producirá una reunión de la Reserva Federal (el banco central estadounidense) en la que ya se adelantó que se anunciará una suba de las tasas de interés para luchar contra la inflación desbocada.
De confirmarse, el alza de tipos será la primera desde que empezó la pandemia, fecha desde la que se mantienen en un rango de entre el 0 por ciento y el 0,25 para dar impulso a la economía.