Los empleados de la maderera Industrias Montecarlo permanecen dentro de la planta en Eldorado tras más de tres meses sin cobrar. Con apoyo sindical, exigen el pago de salarios atrasados y no descartan conformar una cooperativa ante el abandono empresarial.
Tras casi tres meses sin cobrar sus salarios, los empleados de Industrias Montecarlo S.A., en Eldorado, permanecen dentro de la planta reclamando el pago de haberes y la reactivación de la empresa. Con respaldo gremial, no descartan conformar una cooperativa para preservar las fuentes laborales.
En un clima de profunda tensión e incertidumbre, los trabajadores de Industrias Montecarlo S.A. decidieron ocupar pacíficamente la fábrica ubicada en Eldorado, luego de más de tres meses sin percibir sus sueldos. Según denunciaron, la empresa mantiene deudas salariales equivalentes a cuatro quincenas y un reajuste pendiente de casi un año, según el convenio colectivo vigente.
Denis Guayuan, operario con más de dos décadas en la planta, explicó en declaraciones a FM 89.3 Santa María de las Misiones que la situación “es insostenible”. “Nos mandaron un telegrama diciendo que teníamos los sueldos al día, pero nos deben más de dos meses y ya no podemos soportar más”, afirmó.


Los empleados decidieron permanecer dentro del establecimiento industrial, aguardando una posible intervención policial, aunque destacaron que la medida se desarrolla de manera pacífica y organizada. “No tenemos respuestas, no nos pagan, los patrones están ausentes. Lo único que queremos es cobrar lo que nos corresponde, porque ya lo trabajamos”, añadió Guayuan.
Desde el Sindicato de Obreros de la Industria de la Madera de Eldorado (SOIME), su secretario general, Domingo Paiva, confirmó que el gremio respalda la protesta y que la situación ya fue denunciada ante el Ministerio de Trabajo. “Esto ya no da para más, la empresa está abandonada por sus propietarios”, señaló. Además, informó que se labraron actas por la negativa de los dueños a permitir el ingreso de los trabajadores.
Ante la falta de respuestas, Paiva adelantó que el sindicato evalúa la formación de una cooperativa de trabajo para recuperar la planta y sostener los puestos laborales. “Sabemos que la fábrica tiene salida, los productos se pueden vender. Si los dueños no quieren continuar, que paguen las indemnizaciones. Si no, nosotros la pondremos en marcha como cooperativa”, sostuvo.
El dirigente sindical remarcó que la situación afecta a nueve trabajadores, todos con familias a cargo, y que el conflicto ya impacta también en la comunidad local. “Cada día que pasa el crédito laboral crece, y con él la deuda. Estamos hablando de una situación de abandono criminal hacia familias trabajadoras”, denunció.
Por su parte, Guayuan expresó la desesperación que viven: “Tenemos hambre, queremos comer, pagar nuestras cuentas. Promesas no queremos; queremos que nos paguen”. Relató que el día de la toma, bajo la lluvia, se encontraban mojados frente al portón cerrado, y que ingresaron solo para exigir respuestas.
Mientras tanto, el conflicto sigue sin solución, y los trabajadores permanecen firmes dentro de la fábrica, a la espera de que las autoridades o los propietarios den señales concretas para resolver una crisis que ya lleva meses.