Edición n° 2953 . 22/12/2024

Para tener en cuenta en nuestro país/

La energía nuclear podría haber ahorrado 332.000 millones de euros en la transición energética alemana

Un estudio reciente indica que. si Alemania hubiese continuado utilizando su parque nuclear e invirtiendo en nuevos reactores, podría haber ahorrado 332.000 millones de euros en comparación con los costes de su política de transición energética, conocida como Energiewende. La investigación, publicada en International Journal of SustainableEnergy, fue liderada por el profesor de la NorwegianUniversity of Science and Technology, JanEmblemsvag.

Comparación de costes: nuclear vs. Energiewende

De acuerdo con este estudio, el programa alemán Energiwende, centrado en la transición a las energías renovables, ha supuesto unas inversiones estimadas de 387.000 millones de euros con un coste adicional de 310.000 millones de euros en subvenciones, lo que suma un total de 697.000 millones de euros. Por el contrario, si el país hubiese mantenido las centrales nucleares existentes en operación e invertido en nuevas unidades, el coste estimado hubiese sido de tan solo 36.000 millones de euros, significativamente inferior al del programa Energiewende.

“Si Alemania hubiese mantenido su parque nuclear de 2002, habría reducido de forma significativa sus costes y alcanzado  sus objetivos climáticos mucho más eficientemente”, concluye Emblemsvag en su investigación. El informe destaca que, a pesar de que la estimación de los costes de la energía nuclear es compleja, habría sido con gran diferencia más asequible que la política energética actual.

Un estudio confirma que, si Alemania hubiese mantenido su parque nuclear de 2002, habría reducido sus costes y alcanzado sus objetivos climáticos mucho más eficientemente

¿En qué consiste el programa Energiewende?

El programa Energiewende significa «transición energética». Es la estrategia alemana para pasar de un modelo basado en la energía nuclear y los combustibles fósiles a otro en el que se desarrollan e implementan las fuentes renovables como la eólica, la solar y la bioenergía. Iniciado a principios de la década de los 2000, el programa tiene como objetivo hacer más sostenible el abastecimiento de energía. Sin embargo, las voces más críticas argumentan que esta estrategia ha alterado el equilibrio entre los objetivos medioambientales y los objetivos de garantía de suministro y de competitividad económica.

El programa Energiewende se inició a principios de la década de los 2000 con el objetivo de hacer más sostenible el abastecimiento energético en Alemania

Una de las mayores objeciones al Energiewende es el impacto que ha supuesto en la seguridad del suministro energético. Al mismo tiempo que Alemania abandonaba la energía nuclear se volvía más dependiente del uso del gas natural, especialmente de las importaciones desde Rusia, para equilibrar y dar respaldo a su red energética. El estudio llevado a cabo por el profesor Emblemsvag señala que “esta dependencia del gas ruso ha aumentado la vulnerabilidad del país durante la reciente crisis energética, con un coste de 1,5 billones de euros adicionales. Alemania podría haber evitado esta crisis si no hubiese dependido tan fuertemente del gas.”

El profesor del estudio Emblemsvag considera que la dependencia del gas ruso ha hecho que Alemania sea más vulnerable durante la crisis energética

Abandono de la energía nuclear durante la crisis energética

Alemania cerró definitivamente sus tres últimos reactores nucleares -Isar-2, Neckarwestheim-2 y Emsland- en abril de 2023, en el momento en que Europa hacía frente a la crisis energética provocada por la invasión rusa de Ucrania. En 2022, estas tres unidades produjeron el 6% de la demanda eléctrica alemana.

Alemania cerró definitivamente sus últimas tres centrales nucleares en abril de 2023

Antes del accidente de Fukushima en marzo de 2011, la energía nuclear tenía un papel mucho más importante, ya que los 17 reactores que hasta entonces conformaban el parque nuclear alemán producían alrededor del 25% del total. A pesar de los llamamientos a extender la operación de estas tres centrales nucleares, el Gobierno mantuvo su plan de abandono de la energía nuclear.

Una oportunidad perdida

La investigación del profesor Emblemsvag indica que, si la política climática alemana hubiese sido más favorable a la energía nuclear en 2002, el país podría haber conseguido importantes ahorros de costes y haber reducido sus emisiones de CO2. Basado en datos de múltiples países, el estudio evalúa los costes asociados al mantenimiento y a la mejora de las centrales nucleares existentes, considerando factores como los costes del combustible así como de la operación y el mantenimiento.

Analizando lo ocurrido de forma retrospectiva, el estudio sugiere que a Alemania le hubiese ido mucho mejor si hubiera mantenido la energía nuclear, una opción más barata y estable, en lugar de haber apostado exclusivamente por las energías renovables y el gas importado.

Fuente: Nucnet