Los dueños de la soja dicen que pueden liquidar 5000 millones de dólares
Una u otra opción es la propuesta para aumentar el ritmo de las liquidaciones principalmente del complejo de las oleaginosas. El ingreso de divisas es uno de los puntos más sensibles para el Gobierno, ya que necesita robustecer las reservas en un escenario de fuertes vencimiento de deuda en el 2025.
El complejo agrario sigue presionando con una devaluación o una disminución de las retenciones para aumentar el ritmo de las liquidaciones principalmente del complejo de las oleaginosas. Se estima que podrían ingresar hasta 5000 millones de dólares de soja si el gobierno avanza en la reducción de los derechos de exportación.
En detalle, en el panel de cierre de la Experiencia IDEA Rosario, el titular de Cámara de la Industria Aceitera (Ciara), Gustavo Idígoras, estimó que si el Gobierno baja las retenciones del 33 al 25 por ciento, sería posible alcanzar esas liquidaciones en los próximos seis meses.
El ingreso de divisas es uno de los puntos más sensibles para el Gobierno, ya que necesita robustecer las reservas en un escenario de fuertes vencimiento de deuda en el 2025. Idígoras también reveló que desde Ciara estuvieron dialogando con el Gobierno sobre la cuestión, mencionando que «ellos están de acuerdo con el planteo, no con los tiempos que les decimos».
Entre junio y julio el Banco Central no pudo acumular reservas, ya que la agroindustria bajó el nivel de liquidación de divisas. Además, la autoridad monetaria debió salir a intervenir en el mercado cambiario, vendiendo divisas. Más allá de lo discursivo, el gobierno no avanza en la reducción de retenciones o en una devaluación (con unificación cambiaria) porque provocaría un nuevo salto de los precios del mercado interno.
Por lo pronto, el equipo económico sólo avanza en medidas de menor impacto para la recaudación impositiva (la cual se encuentra sumamente golpeada por el desplome de la actividad el mercado interno).
El gobierno anunció este miércoles la eliminación de los derechos de exportación para los productos lácteos y la reducción de estos impuestos para las carnes bovinas y porcinas. La medida fue bien recibida por el sector agroindustrial, y había sido prometida por el presidente Javier Milei durante la apertura de la Exposición Rural el mes pasado. Sin embargo, sigue siendo marginal frente a las presiones del agro para que el gobierno levante impuestos y mejor el tipo de cambio al complejo sojero.
En detalle, se eliminaron los derechos de exportaciones a los lácteos y se redujeron en un 25 por ciento las alícuotas para otros productos derivados de bovinos, porcinos, ovinos y aves de corral. El objetivo, desde la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, con estas acciones es, «apuntar a darle mayor competitividad y previsibilidad a un sector productivo estratégico para la economía argentina».
El Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), entidad que representa a cadenas de valor y cámaras empresariales que abarcan el 16% del PBI, el 67% de las exportaciones y el 12.4% del empleo directo (más de 1.900.000 personas), se mostró a favor de la medida. En un comunicado, el CAA expresó: «La reducción y/o eliminación de impuestos distorsivos como lo son los DEX es el camino correcto para que la producción y exportación de los productos del sector agroindustrial mejoren su competitividad. Esto estimulará una mayor cantidad de bienes producidos, más empleo, agregado de valor y exportaciones, con mayor ingreso de divisas para toda la economía nacional».
Los cortes vacunos, que en 2023 tributaron unos 60 millones de dólares en derechos de exportación, las autoridades argentinas destacaron que a partir de ahora vuelve a la rentabilidad de la cadena vacuna. Políticas en línea con el «Plan Agroindustrial Federal 2023- 2033» del CAA, presentado en marzo del año pasado, que incluye un esquema de rebaja gradual para los cultivos industriales.
