Con siete presentaciones de productos, buscan diversificarse para llegar a nuevos públicos.
La Cooperativa de Trabajo Cerealcoop Limitada, empresa recuperada de la ciudad de Tres Arroyos, continúa incorporando trabajadores y trabajadoras, a la vez que suma nuevos productos a su oferta.
La entidad se conformó como una cooperativa en el año 2020, luego de dos años de tensiones con la patronal, que dejó de pagar los sueldos cuando la empresa entró en concurso preventivo. Entonces, entraron en contacto con personas que habían pasado por situaciones similares, y empezaron a organizarse.
“En febrero de 2020 iniciamos el proceso de la formación de la Cooperativa. Mandamos todos los papeles, nos agarró en parte la pandemia, que creíamos que se iba a frenar todo, pero despacito sigue traccionando”, contó el referente de Cerealcoop, Sebastián Anta, quien indicó que para el mes de junio ya habían conseguido la matrícula.
Luego, a través de concursos, a través del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), y el Ministerio de Desarrollo Social, lograron el primer subsidio que les permitió realizar las conexiones de energía y gas a la planta.
Anta explicó que “en julio de 2021 inauguramos la planta: la planta que procesa cereales para relleno, en este caso nuestro primer producto granola arroyada a granel, que se va haciendo conocida a lo largo y ancho del país”.
“Hace un año y pico estamos trabajando, progresando, vendiendo. Somos autogestivos, y hemos tenido el respaldo del estado para el crecimiento de la planta y la compra de la materia prima que es importante”, afirmó.
En cuanto a la producción, realizan avena gruesa, avena instantánea, tradicional, extrafina, y poseen un molino para hacer harina de avena, salvado de avena, y avena integral.
Para esta cantidad de productos, la Cooperativa, formada por 84 personas, le da trabajo activamente únicamente a treinta. Sin embargo, con la proyección de incorporar la producción de copo de maíz y copo de maíz saborizado, en conjunto con una línea de envasado, pretenden sumar a quince personas más.
El referente cooperativo aseguró que “nuestro desafío es diario, para aunar fuerzas para que la mayor cantidad de los asociados puedan estar trabajando. La planta significa mucho para Tres Arroyos. Transcurrimos dos años de abandono, de acompañamiento del pueblo para visibilizar lo que estaba pasando, y hoy en día formamos parte y estamos trabajando. La verdad que la comunidad se ha puesto muy contenta y a disposición de la cooperativa para un montón de cosas”.
El próximo proyecto se desarrollará gracias al programa de INAES de Reactivación y Desarrollo Productivo (Redeco), a partir del cual recibirán asistencia financiera para invertir en la compra de láminas que permitan fraccionar la avena en paquetes de 350 y 400 gramos.
“Lo que nosotros queríamos hacer era estar trabajando dentro de empresas recuperadas de la Economía Social, así que una Cooperativa de La Matanza va a estar trabajando con nosotros para poder envasar”, concluyó Anta.
Fuente: El Portal de las Cooperativas