El Gobierno precisó la información que deberán entregar los usuarios para solicitar la continuidad de los subsidios a las tarifas de electricidad y gas.
El Gobierno dio un paso más hacia la aplicación de la segmentación de tarifas. Formalizó vía Boletín Oficial los datos que se pedirán a los usuarios de luz y gas que quieran mantener los subsidios. Se espera que en breve esté el formulario disponible en la web argentina.gob.ar.
Tras la designación oficial de Santiago López Osornio -funcionario de confianza de Martín Guzmán dentro de la Secretaría de Energía- como instrumentador de la segmentación, el Gobierno comenzó a avanzar en los pasos legales para implementar la segmentación de tarifas. Esta mañana le tocó al formulario que servirá como declaración jurada para que las y los usuarios de luz y gas certifiquen su situación socioeconómica para pedir el subsidio.
La base de datos para el Registro de Acceso a los Subsidios Energéticos (RASE) será administrada por la Subsecretaría de Planeamiento Energético de la Secretaría de Energía del Ministerio de Economía. Se visualizará como un formulario digital disponible en la página argentina.gob. ar y pedirá los siguientes datos:
- Documento de Identidad
- N° de Trámite
- Nombre y apellido
- CUIL
- Género
- Fecha de nacimiento
- Datos socioeconómicos
- Situación laboral
- Datos de contacto
- Domicilio declarado por el usuario
- Código Postal
- Relación con el domicilio
- Datos del servicio de la luz
- Datos del servicio de gas
- Datos del grupo conviviente
Asunto pendiente
Con esta disposición, sumada a la resolución del martes que delega la responsabilidad de la segmentación en López Osornio, y el decreto que determina los criterios en los que se basará el gobierno para otorgar subsidios publicado hace dos semanas, parecería estar llegando el final de un conflicto que el Estado acarrea hace por lo menos una década: aplicar una segmentación de subsidios para las tarifas de luz y gas.
La historia reciente exhibía dos vertientes, aquella que quería aplicar como criterio para la segmentación la zona geográfica, y la otra por nivel socioeconómico. El decreto se definió por la segunda aunque sin una hoja de ruta clara para implementarla que, de a poco, comienza a trazarse.
La definición más importante que se dio hasta ahora es sobre los parámetros socioeconómicos de las personas a las que les correspondería (o no) seguir recibiendo el subsidio, universo dividido en tres niveles diferentes. El segmento de ingresos altos o nivel 1 son los hogares con ingresos mensuales de 350.000 pesos o más a mayo (es decir 3,5 canastas básicas para un hogar tipo 2, de cuatro integrantes, según el índice del Indec); con 3 o más autos; 3 o más inmuebles; una embarcación, una aeronave de lujo o son titulares de activos societarios que exterioricen capacidad económica plena. El nivel 2 o segmento de ingresos medios son hogares con ingresos desde 100.000 hasta 350.000 pesos (entre 1 y 3,5 canastas básicas), hasta 2 inmuebles y hasta 2 vehículos con una antigüedad menor a 5 años.
Finalmente el nivel 3 o segmento de ingresos bajos son los hogares con ingresos menores a 100 mil pesos (1 canasta básica para un hogar tipo 2, con cuatro integrantes, según Indec), 1 o ningún inmueble, ningún vehículo con menos de 3 años de antigüedad, excepto para los hogares en donde exista al menos una o un conviviente con Certificado Único de Discapacidad (CUD). Con los aumentos del primer cuatrimestre, quienes integren al nivel 2 y 3 no recibirán más aumentos por este año de acuerdo a lo establecido. Es el 1 el que verá un impacto en su factura final.
Para ubicar a los y las usuarias en estos niveles, el Gobierno solicitará que completen la declaración jurada mencionada más arriba y conformará el RASE. Luego, podrá verificar lo declarado a través del cruce de datos con otras entidades estatales y finalmente le comunicará a los entes reguladores (Enargas y ENRE) que serán los encargados de comunicar a los usuarios. Habrá disponible también un formulario para que los usuarios que no están de acuerdo con el nivel de ingresos en el que fueron ubicados puedan «requerir la consideración».
A pesar de que se van despejando, aún quedan muchas preguntas abiertas en el camino de la segmentación. Entre las más importantes se encuentran los montos: en el gobierno nadie define cuál será el porcentaje de aumento de los servicios públicos para quienes dejen de recibir los subsidios ni los procesos, modos, periodos y mecanismos de facturación. Tampoco hay fechas establecidas: el formulario, que debía estar disponible la semana anterior según el calendario que brindó el propio Ministerio de Economía, aún no se encuentra disponible.