Quienes insisten, desde el principio del proceso concursal de Vicentin, que se trataba de un «procedimiento amañado» entre el magistrado, los directivos de la empresa y una de las firmas interesadas en quedarse con sus activos, recibieron con satisfacción una inédita resolución de este jueves: la Suprema Corte de Justicia de Santa Fe intervino la convocatoria de acreedores de la cerealera, reclamándole al juez interviniente, Fabian Lorenzini, la remisión de todo el expediente.
El presidente de la Corte, Julio Gutiérrez, según cita el portal digital Rosario 3, tomó en cuenta la denuncia de «gravedad institucional que supone el avance de la convocatoria cuando hay en paralelo investigaciones penales por serias irregularidades en torno a los activos que ahora la firma está pretendiendo vender», que formuló uno de los acreedores, Grassi SA.
En consecuencia, solicitó «la remisión del expediente a los fines que esta Corte pueda expedirse con los autos principales a la vista» y dispuso la suspensiónde todos los términos (plazos y trámites en curso) de la convocatoria de acreedores.
Viterra, firma controlada por Glencore, había presentado una propuesta de resolución del concurso de acreedores mediante el pago de una parte menor de la deuda de u$s 1400 millones que engloba la convocatoria, en favor de los acreedores más chicos, ofreciendo la cancelación a muy largo plazo del resto pero a partir de tomar el control de la empresa Vicentin SA.
Pero entre las operaciones cuestionadas ante la Justicia por los acreedores, está la venta del 16% de las acciones de la firma Renova, de Vicentin a Glencore, «horas antes de declararse en cesación de pagos», en diciembre de 2019. La investigación sobre la legalidad de estas operaciones están ahora en el eje de la intervención del tribunal supremo. Como primer paso, citó al juez Lorenzini para que se presente a dar explicaciones sobre toda la marcha del proceso, según cita Rosario 3.
